El conductor de dicha unidad, Guillermo Cañarte Marcillo, informó que a las 12h30, en la terminal terrestre de Jipijapa, tres sujetos jóvenes le pidieron una carrera al recinto La Unión de Paján, pero antes de llegar a su destino lo intimidaron con un cuchillo, lo amarraron, lo golpearon en la cabeza y lo pusieron en el asiento trasero.
Conducido por uno de los pillos el taxi avanzó un trecho, hasta que pararon la marcha y hablaron entre ellos de matarlo, pero uno de los sujetos sugirió que lo lanzaran a un barranco, como así lo hicieron.
A los pocos minutos Cañarte logró zafarse de sus ataduras y salió caminando hasta un poblado, donde lo ayudaron y un solidario motociclista lo trasladó hasta la vía Jipijapa-Guayaquil, y también llamó a la policía de Paján. Cañarte abordó un bus de la cooperativa Jipijapa, cuyo conductor comunicó de inmediato a la policía de Jipijapa y a los compañeros del asaltado, quienes salieron en grupos a rescatar el taxi.
El taxi fue recuperado a las 16h00 en el recinto Río Hondo de Paján, donde lo dejaron abandonado, no se sabe si por alguna falla o porque los delincuentes se percataron del operativo de los agentes. La semana pasada otro taxista,  Tulio Pincay, de la cooperativa Stereo Guía, accedió a una carrera que le pidieron dos sujetos, pero en el coliseo de la ciudadela Eloy Alfaro llegaron tres cómplices encapuchados que lo golpearon y se le llevaron el carro, pero se les bloqueó a poca distancia y lo abandonaron en la vía al sitio Colchaquita.