Uno de ellos es Mario Cedeño, habitante de la ciudadela Los Cerezos, quien comentó que en la provincia no hay control por parte de las autoridades a los locales que venden este tipo de prendas.
Pedro Gallegos, jefe de la Policía en Manabí, en declaraciones para Manavisión, en días pasados, dijo que la falta de control existe en otras ciudades como Quito y Guayaquil, pues los accesorios de policías y militares son muy fáciles de conseguir.
Además dijo que en la provincia no existen paramilitares, sino delincuentes vestidos con ropa militar, refiriéndose a los sujetos que acribillaron a los tres hombres en Santa Ana.
Rosa Vinueza, propietaria de  Creaciones Militares Vinueza, indicó que en su establecimiento sólo se vende a militares o policías.
El local, que está ubicado frente al Fuerte Militar de Manabí, tiene todo tipo de accesorios, desde botas, medias, gorras, hasta uniforme camuflaje.
"Si una persona viene a comprar al local, se le pide la credencial, si no la tiene no se le puede vender", explicó.
Vinueza aclaró que el uniforme de los militares ha cambiado, pues asegura que ya no utilizan en camuflaje, sino el uniforme pixelado.
Dijo que muchas veces las personas desconocen y es por eso que hay los robos.
Otro de los locales que vende accesorio de policías es Crio Bar, donde su propietaria, Sonia Cárdenas, indicó que en lugar sólo se le vende a personas que sean policías.
Ella manifestó que, al igual que el otro establecimiento, piden credenciales para poder vender un accesorio.
Dijo que justamente por los asaltos y robos que se han cometido es muy difícil encontrar la tela para hacer los uniformes, pero criticó el control que existe en las otras ciudades y de las personas que compran en otros países y los traen a Ecuador.