Emilio Segundo Bowen Bolaños, soltero, de 22 años de edad, quien es acusado de ser el autor intelectual del deceso de Max Madnick Chamberlin, aseguró que el norteamericano fue amenazado de muerte.
Chamberlin fue encontrado herido en el interior de un vehículo en el sector de Barbasquillo, de Manta, con un balazo en la cabeza; dos horas después falleció en el hospital Rafael Rodríguez Zambrano.
En el 2008 a Max se le presentó la oportunidad de venir a esta ciudad como estudiante de intercambio en el colegio Julio Pierregrosse y residía con la familia Bowen Bolaños en un domicilio ubicado en la ciudadela Lomas de Barbasquillo; vivió un año y en ese tiempo conoció a Jaqui Silva, de quien se enamoró; luego regresó a los Estados Unidos.
Bowen y Chamberlin compartían muchas cosas, y entre ellos se notaba una gran amistad. En mayo de 2009 Max regresó a Manta para visitar a su novia y construir un pequeño edificio de apartamentos. Ya tenía planeado quedarse a residir en el inmueble de tres pisos y vivir de los alquileres.
Él siguió viviendo con los Bowen, y cuando decidió construir la casa, que está ubicada en la ciudadela Los Eléctricos, Emilio Bowen y otros amigos lo ayudaron a realizar los trámites de los permisos, entre otras actividades. Todo transcurrió con normalidad, hasta que Max fue asesinado justo cuando el edificio ya estaba casi concluido.
En febrero de este año Bowen fue entrevistado por un periodista de TC sobre la muerte de Max.
Dijo que a su “hermano” lo veía raro y preocupado porque un Suzuki blanco lo seguía constantemente y éste le había comentado que lo habían llamado para amenazarlo de muerte.