Hoy, un grupo de padres de familia y profesores del Liceo Naval Guayaquil, se reunieron en los exteriores del plantel, para exponer sus preocupaciones debido al decreto del traspaso de los colegios militares a fiscales para el próximo año.

Los padres manifestaron sentir cierta incertidumbre, ya que no saben si sus hijos obtendrán el cupo para el próximo año.

María Isabel Solis, miembro del directorio de padres de familia del plantel, que está ubicado en la avenida Pedro Menéndez Gilbert, Base Naval Norte, asegura no sentirse conforme con este decreto, ya que la educación que se da en el colegio decaerá.

“Este colegio es uno de los mejores que hay en la ciudad. Si pasa a ser fiscal la educación y la disciplina no será la misma”, manifiesta Solis.

Al igual que ella el docente Policarpio Villagómez, indica que ninguna autoridad educativa se ha acercado a la institución,`para tratar la situación de los maestros.

“No sabemos que va a pasar con nosotros. Yo trabajo en un colegio fiscal, a parte del Liceo, pero cuando este pase a ser fiscal, ya no podré trabajar en el otro”, dice el maestro.

Otra de las peticiones que hacen los docentes, gira en torno a la estabilidad laboral, ya que muchos piden quedarse en la misma institución.

José Rendón, miembro del directorio académico del Liceo Naval, manifiesta que para este jueves, todos los maestros de los colegios militares de la ciudad, realizarán una marcha en Quito, para que se respeten sus peticiones.