Se espera que durante este jueves puedan ser rescatados esos nueve cuerpos que permanecen dentro de la mina, detalló una fuente del Instituto Colombiano de Geología y Minería (Ingeominas).

La tragedia se inició hacia la medianoche del pasado miércoles, cuando se registró una explosión, presumiblemente por acumulación de gases en la mina San Fernando, ubicada en una zona rural del municipio de Amagá, en el departamento de Antioquia (noroeste).

En el momento del accidente, que se produjo cuando se realizaba el cambio de turno de los trabajadores, había unas 160 personas en el túnel de la mina, de las que 90 lograron salir y 73 quedaron atrapadas, según las últimas cifras oficiales.

La fuente de Ingeominas explicó a Efe que desde el día siguiente de la explosión hay una comisión de expertos en el lugar para investigar las causas de la tragedia y que su informe preliminar se conocerá probablemente la próxima semana.

El presidente colombiano, Álvaro Uribe, viajó el pasado sábado hasta Amagá para acompañar a los familiares de las víctimas, después de haber ordenado el cierre de la mina por dos semanas para agilizar las investigaciones.

En noviembre de 2008, una inundación en un túnel de esa mina causó la muerte a cinco personas, mientras que en 1977 perdieron la vida otras 86 a causa de una explosión en otro yacimiento de carbón en Amagá.