"Estamos metiendo el acelerador a fondo para recuperar el tiempo perdido" en la integración, señaló Correa, que el pasado martes mantuvo una reunión con el secretario general de la Unasur, Néstor Kirchner, para evaluar la marcha del grupo, creado en diciembre de 2004.

Desde la Independencia colonial, "200 años hemos perdido. Tenemos que recuperar el tiempo perdido", insistió el presidente ecuatoriano, cuyo país mantendrá la presidencia pro témpore de la Unión hasta agosto próximo, cuando la entregue a Guayana.

Según el mandatario, en Suramérica "nacimos unidos y nos desunimos", mientras que "los Estados Unidos nacieron desunidos y se unieron".

Los estadounidenses "fueron más inteligentes que nosotros, tenemos que reconocerlo. Uno de los grandes errores (históricos) fue no permanecer unidos", añadió Correa.

Durante la reunión entre Correa y Kirchner, ambos evaluaron la marcha de la Unión y las proyecciones para su fortalecimiento y funcionamiento.

El canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, que también participó en el encuentro, explicó que en la cita se habló sobre el Tratado Constitutivo de la Unasur que, de momento, sólo ha sido ratificado por Argentina, Bolivia, Ecuador, Guayana, Perú y Venezuela.

Según Patiño, en unos tres meses más se espera que ratifiquen dicho documento los parlamentos de, al menos, la mitad de los seis Estados que faltan por hacerlo: Brasil, Chile, Colombia, Paraguay, Surinam y Uruguay.

El canciller también informó que Correa y Kirchner revisaron el diseño arquitectónico del edificio sede de la Unasur, que se construirá en Quito, probablemente en la ciudadela "Mitad del Mundo", por donde pasa el paralelo cero.

Asimismo, en la cita se conversó sobre el proceso de traspaso de la Presidencia pro témpore de la Unasur, que actualmente ocupa Ecuador, a Guayana, que asumirá esa designación en agosto próximo.