No obstante de estos problemas, la actual cosecha será mejor a la del invierno del 2009.
El año pasado por esta fecha, los silos de la Unidad Nacional de Almacenamiento localizada en Portoviejo, estaban casi llenos, actualmente no llegan ni al 50 por ciento, debido al retraso que hubo en el invierno y que ha provocado una demora en la cosecha.
Ángel Bermeo Mero, productor del sitio San Eloy, del cantón Rocafuerte, sembró este año 14 hectáreas de maíz y ha cosechado ya 500 quintales, y considera que todavía le resta por cosechar otros 360 quintales. No obstante, el año pasado sembró 10 hectáreas y apenas obtuvo 120 quintales de maíz.
Con esos resultados, Bermeo se atreve a decir que el invierno fue muy bueno para los productores de maíz, salvo por las afectaciones que causaron las plagas de gusanos que perforaron la hoja de la planta, y que según conoce se dio en toda la provincia.
Comercialización
Desde el 21 de mayo se abrió la temporada de comercialización de maíz en la UNA. El primer vehículo cargado con la gramínea ingresó en esa fecha con 86 quintales y pertenecía al productor Vidal Véliz Barreiro.
La UNA tiene capacidad para almacenar 4 mil toneladas de maíz, y hasta el 14 de junio habían ingresado 270.364,90 quintales.
El precio que está pagando la UNA es de 13,25 dólares por quintal con 13 por ciento de humedad y 1 por ciento de impurezas, informó el jefe encargado de la planta, Andrés Oliveros.
Además de la unidad de almacenamiento en Portoviejo, existen tres centros de acopio, uno que funciona en el kilómetro 1, en la vía a Bahía de Caráquez, de Acoexpo, donde se acopia maíz;  los silos de La Fortuna en Chone, donde también se acopia maíz; y en Olmedo, donde se ha contratado una bodega de la Cedocao para acopiar arroz. Estos centros de acopio tienen una capacidad de almacenamiento de 50.000  quintales.
Según informó Oliveros, a finales de este mes se habilitará la bodega de los silos de Tosagua que servirán como centro transitorio del producto.
Transportación
Con la cosecha de maíz la transportación adquiere una dinámica importante. Así lo confirmó Arturo Mendoza, quien llegó hasta la UNA con un camión cargado con el grano.
Según el transportista, dependiendo de la distancia varía la tarifa del transporte de un quintal de maíz. El maíz que transportaba Mendoza provenía de La Mocora, de la parroquia Colón, por el cual el productor debía pagar 45 centavos por cada quintal colocado en la UNA.
Mendoza realiza tres y cuatro fletes por semana desde que se inició la cosecha, lo cual le genera ingresos.