El pequeño C.M.M jugaba con un hermanito frente a la casa de sus padres, cuando súbitamente se desplomó y cayó al suelo.
Los gritos del niño que lo acompañaba alertaron a su madre Alexandra, quien acudió rápidamente y encontró a su hijo tirado en el suelo, sangrando por su pierna derecha. El hecho ocurrió a las 06h30 de ayer.
El estruendo de un disparo que ella y algunas personas escucharon unos segundos antes, permitió concluir que el niño había sido herido por una bala perdida.
La madre pidió ayuda y trasladó al niño al hospital Rafael Rodríguez Zambrano. Los galenos se percataron que la bala había ingresado por la zona inguinal derecha. El resultado de un examen de rayos X determinó que el proyectil se alojó en la espalda, pero sin dañar ningún órgano vital, según informó el doctor Enrique Roca.
Práctica ilegal
Hacer disparos al aire no sólo es una práctica ilegal y temeraria, sino extremadamente peligrosa.
Según el juez Ricardo La Mota, el sólo hecho de que una persona porte un arma es un delito, porque en la actualidad nadie puede portarlas, a excepción de los elementos de la fuerza pública como militares y policías. “Más aún si la persona dispara al aire, ya que en ese momento puede ser encarcelada”, dijo.