Este mes, el Consejo Nacional de Radio y Televisión (Conartel) inició un proceso de clausura definitiva contra la Voz de Arutam, que estaba acusada de, presuntamente, promover la violencia durante unas protestas de campesinos a mediados de año, donde resultó muerto un profesor de la etnia Shuar.
Atamaint ratificó en el Canal Uno que, a través de esa radio creada en la década de los setenta, se convocó a una "movilización pacífica" en protesta porque consideraban que el Gobierno pretendía privatizar el agua, pese a que éste lo negó insistentemente.
Al asegurar que habla en nombre del pueblo Shuar, la asambleísta señaló que van a "defender" hasta con la vida la posibilidad de levantar su voz.
"Si es que se llegara a clausurar la radio Arutam de forma definitiva, porque estamos en un proceso judicial, vamos a instalar una radio clandestina desde la inhóspita selva y seguiremos hablando con nuestra verdad", señaló.
Las acciones contra la radio Arutam así como la suspensión temporal, por tres días, del canal local Teleamazonas, crítico al Gobierno, levantó polémica en el país por temor a que se intente coartar la libertad de expresión.
La Superintendencia de Telecomunicaciones sancionó el pasado martes a la televisión Teleamazonas por, presuntamente, haber difundido una información basada en supuestos, que pudieron causar conmoción social.
El canal, que volvió al aire el pasado viernes, asevera que transmitió el temor de pescadores, en el sentido de que los trabajos de exploración de gas en la isla Puná (oeste), por parte de la petrolera venezolana PDVSA, afectaran a sus actividades.