Según un guía de este centro dijo que el hoy occiso habría sufrido una fuerte depresión por lo que supuestamente tomó esta fatal decisión de ahorcarse y acabar con su vida debido al encierro que debía pagar por el supuesto delito de robo de vehículos en la ciudad de Manta en días anteriores.
Según el guardia, Fernández tenía tres días de haber ingresado a este centro de reclusión y que lo vio con vida hasta las 12h00 de ayer cuando lo llevo hasta el departamento médico de dicho reclusorio para que el recluso se realizara unos exámenes médicos de rigor.
Luego lo habría dejado minutos más tardes en la misma celda para que descansara sin ningún problema, mas tarde, alrededor de las 14h15 otro guardia que pasaba por el calabozo donde estaba Fernández se percató que el recluso estaba inmóvil con signos de haberse ahorcado, es entonces cuando dio aviso a las autoridades delo sucedido, dijo el guardia.
A todo esto, los familiares del fallecido dijeron que no les convence la historia de que su ser querido se habría suicidado sino que aseguraron que fue asesinado dentro de su celda por otro reo por razones desconocidas.
Personal de la Policía Nacional y del departamento de Criminalística llegaron hasta centro de rehabilitación para realizar las investigaciones, tomar datos y transportar el cadáver hasta la morgue del cementerio general en Portoviejo.
Según la hermana de la victima comentó que Oscar Fernández era el cuarto de cinco hermanos y que dejaría en la orfandad a cuatro hijos, todos menores de edad. El occiso era oriundo del cantón Chone por lo que sus restos serían llevados hasta esta ciudad para su posterior sepultura.