Por ejemplo, los mil bidones de agua que se entregaron el viernes en la parroquia Boyacá de Chone, con la presencia del presidente Correa, se agotaron el mismo día que los moradores pugnaron por obtener el líquido vital.
Ramonita Vélez, vocal de la junta parroquial, dijo que luego del retorno del presidente la población pudo asegurar una pequeña reserva de bidones para las instituciones educativas y dos comunidades, que apenas recibieron veinte bidones. Vélez dijo que en el transcurso de la semana deberá llegar más agua y raciones alimenticias.
Sin embargo, hay lugares a los que ni agua ha llegado y temen que la situación se agrave. Es el caso de las zonas altas de la parroquia Charapotó del cantón Sucre, historia que se repite en gran parte de Manabí.

Clamor
Ayer un grupo de dirigentes de varias comunidades de esta parroquia acudió hasta la Senagua y la Gobernación para pedir ayuda.
La presidenta de la comuna San Ramón, Ludys Chumo, indicó que la situación es desesperante, ya que no tienen agua para consumo humano y peor para los animales.
“El ganado se está muriendo, no podemos cosechar nada y lo que es peor, no sabemos si nos van a ayudar”, dijo Chumo.
Por su parte, la gobernadora de la provincia, María Luisa Moreno, aseguró que todos los rincones de la provincia serán atendidos, ya que con el estado de excepción que fue decretado el viernes por el presidente Correa podrán obtener los recursos para hacerlo.
Informó que el jueves iniciarán la campaña de recuperación del sector ganadero, en la que planean entregar medicinas, vitaminas, balanceado, melaza, entre otros productos. A este beneficio podrán acceder quienes tengan de 1 a 80 reses.
La gobernadora indicó que se dejó sin efecto que los ganaderos tengan que obligadamente presentar el certificado de vacunación contra la fiebre aftosa.

Represas
El subsecretario de la Senagua, Xavier Valencia, señaló que el agua de los embalses está garantizada hasta el mes de enero, en que se prevé comience a llover. Explicó que la cota (metros sobre el mar) máxima de Poza Honda es de 105 metros y que ahora está en 101, es decir está dentro de los parámetros normales, ya que la cota mínima es de 90 metros.
Valencia reconoció que se está trasvasando agua desde La Esperanza a través del bombeo de 10 horas diarias, pero aseguró que eso no significa que la sequía esté afectando las presas.
Sin embargo, dijo que si no llueve en los próximos meses sí tendrían problemas.