En declaraciones a periodistas, el presidente de la Asamblea, Fernando Cordero, del oficialista movimiento Alianza País, hizo la invitación a la CIDH para que "vigile" el proceso de construcción del cuerpo legal y verifique el "respeto irrestricto a los derechos constitucionales sobre la libertad de expresión".

"No cabe duda que esta Ley protegerá y garantizará los derechos humanos", aseguró el jefe del Parlamento ecuatoriano y subrayó que la norma no entrará en contradicción con la Constitución, como temen los sectores de oposición.

"La Asamblea es cuidadosa de aprobar proyectos que beneficien a todos", remarcó Cordero al recordar que la CIDH es una entidad del Sistema Interamericano de integración orientada a la protección y promoción de los derechos humanos en las Américas.

Una comisión parlamentaria especial que elaboró un texto sobre la Ley de Comunicación concluyó su trabajo, pero no se salvó de las críticas de la oposición y de representantes de varios medios de comunicación del país, que consideran a ese cuerpo legal como una "ley mordaza" y "antidemocrática".

No obstante, el oficialismo ha remarcado que la Ley, que aún debe ser aprobada en dos debates en la Asamblea, busca regular la actividad y fortalecer el derecho a la libertad de expresión para todos los ecuatorianos.