El incidente ocurrió el pasado 22 de octubre, cuando Arruda tuvo que ser escoltada por la policía para poder abandonar la Universidad Bandeirante (Uniban), situada a unos 25 kilómetros de Sao Paulo.
Sus compañeros la insultaron y casi agredieron físicamente por la "provocadora" minifalda que usaba y filmaron vídeos sobre lo ocurrido que luego colgaron en la internet .
Las imágenes fueron utilizadas por canales de televisión y el caso cobró repercusión, que fue luego mayor cuando la Uniban anunció el pasado domingo que había decidido expulsar a Arruda debido a su "flagrante falta de respeto a los principios éticos, a la dignidad académica y a la moralidad".
La ola de protestas que generó la expulsión, incluso en órganos del Gobierno como el Ministerio de Educación y la Secretaría de Defensa de las Mujeres, fue tal, que dos días después la universidad dio marcha atrás y anunció que había decidido readmitir a la alumna.
El incidente ha disparado a Geisy Arruda a las páginas de la gran prensa nacional y ha despertado el apetito de la edición brasileña de la revista Playboy, que se ha mostrado interesada en tener en su portada a la universitaria de 20 años.
Según el director de la publicación, Edson Aran, Arruda cumple con lo que él considera que son los requisitos para ser una de las portadas de esa publicación, famosa por mostrar mujeres desnudas: "ser bonita y tener notoriedad".
Sin embargo, esa posibilidad fue descartada por la universitaria, quien ha dicho que solo desea retomar sus estudios de turismo sin ser molestada.