El Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo, en Francia, consideró que la presencia obligatoria de crucifijos en las aulas constituye "una violación" de los derechos de los padres a la educación de sus hijos.
El alto tribunal de derechos humanos, que no es una institución de la UE, considera que la presencia de ese símbolo de la religión católica es una violación de la libertad de credo de los alumnos, según reza la sentencia.
El caso se inició en 2002 cuando la ciudadana italiana nacida en Finlandia Soile Lautsi presentó una demanda ante los jueces de Estrasburgo, al considerar que la escuela pública donde estudiaban sus dos hijos, de 11 y 13 años, en Abano Terme, el norte de Italia, violaba sus derechos como madre, al imponer a sus hijos una determinada presencia religiosa.
Italia ya ha anunciado que apelará la sentencia del Tribunal de Estraburgo en relación con esta decisión.
Fuente: Confirmado.Net