ACNUR, en un comunicado difundido hoy, informó que el pasado 28 de septiembre, en la localidad de Barrancabermeja, en el norte de la provincia amazónica de Sucumbíos (Ecuador), fue asesinado el presidente de esa comunidad, Miguel Lapo, a manos de desconocidos.
Un día después, añade el texto, en la vecina comunidad de San Martín, asentada también cerca del río San Miguel, fue asesinado Miguel Pinzón, ex presidente de esa localidad.
ACNUR "lamenta los asesinatos de ambos dirigentes, se solidariza con sus familias y repudia este hecho como un atentado a la paz en la frontera norte del Ecuador", precisa el documento.
"No perdemos la esperanza de que las investigaciones que se están desarrollando permitan identificar a los autores" de los asesinatos, añade el comunicado de ACNUR.
Además, recordó que Lapo fue uno de los fundadores de la comunidad de Barrancabermeja, hace unos 20 años, y lo identificó como un hombre de "carácter humanitario" que se constituyó en un "baluarte de la protección de refugiados colombianos en la zona".
Sobre Pinzón, ACNUR también lo identifica como "un hombre de paz", por lo que insistió en deplorar la pérdida de los dos ecuatorianos.
ACNUR atiende en la frontera a miles de refugiados colombianos que han cruzado la divisoria hacia Ecuador, tras huir de la violencia en su país.
La provincia amazónica de Sucumbíos comparte una extensa divisoria con el departamento colombiano de Putumayo, una región donde operan grupos guerrilleros y de paramilitares de Colombia.