La ciudad de Río de Janeiro ganó en la votación final de la Asamblea del Comité Olímpico Internacional (COI), realizada en Copenhague, Dinamarca, y a la que llegó con Madrid como rival después de la eliminación de Chicago y Tokio.

Uno de los más felices con la decisión del COI fue el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien señaló hoy en conferencia de prensa que su país y Río de Janeiro "necesitaban" organizar los Juegos Olímpicos de 2016 y "merecían esta oportunidad".

"Por ser un país colonizado, tenemos la manía de sentirnos pequeños, no ser importantes, que no podíamos. Queríamos esta oportunidad para ser una gran nación, sabemos trabajar cuando somos provocados", dijo Lula, quien añadió que Brasil "organizará en 2016 los mejores Juegos Olímpicos que haya visto el mundo".

Los deportistas brasileños también se sumaron al festejo y manifestaron su expresión de júbilo por la elección de la capital carioca, la segunda de un país latinoamericano que organizará unos juegos de verano tras Ciudad de México en 1968.

El baloncestista Anderson Varejao, del equipo estadounidense Cleveland Cavaliers, consideró que la elección "fue la mejor noticia para el deporte brasileño y una conquista sin tamaño".

"Viví en Barcelona y vi cómo ese pueblo le agradece a los Juegos de 1992 por la transformación por la que pasó la ciudad. Tenemos tiempo y capacidad suficientes para hacer la mayor edición olímpica de todos los tiempos", opinó.

Por su parte, el regatista Robert Scheidt, ganador de cuatro medallas olímpicas, dos de ellas de oro, y diez veces campeón mundial, destacó que en el "ámbito económico" Brasil recibirá "voluptuosas inversiones directas e indirectas para la infraestructura y el turismo".

"Lo más importante, sin embargo, será la exposición positiva para el mundo del potencial de Brasil", agregó.

El voleibolista Dante, campeón olímpico en Atenas 2004 y plata en Pekín 2008, expresó: "llegó la hora de Brasil después de los Panamericanos (2007) y el Mundial de Fútbol (que recibirá en 2014). Los Juegos van a ser un éxito y el país va a crecer mucho después del evento".

La felicidad por el triunfo se expandió por toda Sudamérica y varios de los gobernantes, deportistas y principales personalidades de la región así lo hicieron saber.

"¡Qué bueno que ganó Brasil!", exclamó la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, quien destacó el hecho de que en "América Latina se van a hacer los Juegos Olímpicos 2016", antes de partir hacia la región del Bío Bío, en la que cumple hoy una gira de trabajo.

A su vez, el secretario de Deportes del Gobierno argentino, Claudio Morresi, dijo que la elección de la ciudad carioca como sede los Olímpicos de 2016 "enriquece al deporte sudamericano", y resaltó que todos los países de la región están "felices".

El jefe de Estado peruano, Alan García, se unió al júbilo sudamericano por una designación que "hace justicia al país del futuro". "El triunfo lo sentimos como nuestro, porque es de toda Sudamérica", aseveró.

En Colombia, el mandatario Álvaro Uribe también se congratuló por la elección de Río. "Nos sentimos muy contentos y por eso le damos unas felicitaciones muy grandes al Gobierno de Brasil, al presidente Lula y al pueblo", señaló.

El paraguayo Fernando Lugo comentó que felicitó por teléfono a su homólogo brasileño, del que dijo "está muy emocionado", y destacó que Brasil demostró que América del Sur "también puede" albergar una competición de envergadura.

En tanto, el presidente de la Federación Deportiva Nacional del Ecuador (Fedenador), Julio Ramírez, expresó su satisfacción por la designación de Río y apuntó: "Brasil es nuestro techo, nuestra región Sudamericana, que cuenta con un liderazgo muy fuerte, por lo que considero que es un premio para ese país y la región".

La prensa uruguaya también se mostró entusiasmada con la histórica decisión del COI, al apuntar que "Río de Janeiro hizo historia hoy al convertirse en la primera ciudad sudamericana en ser sede de los Juegos Olímpicos al vencer en la final a Madrid, Chicago y Tokio". EFE