Pues ahora los delincuentes no roban los carros para desmantelarlos o utilizarlos en algún atraco, sino que lo hacen con la finalidad de extorsionar a los dueños, y pedirles hasta cinco mil dólares por devolverlos. Desde enero a la fecha se han receptado 48 denuncia en la fiscalía por robo de carros y unas 87 por el de motocicletas. Esto sin contar con los robos no denunciados. Los habitantes del sector dijeron que la delincuencia nuevamente está tomando fuerza, aunque reconocieron que los asesinatos se han disminuido, pero en cambio los delitos contra la propiedad y las personas han aumentado. No pagar recompensa Juan Ruales, jefe del comando local, indicó que es consciente de que el robo de carros ha aumentado, pero dijo que uno de los motivos por lo que se ha registrado este delito, es porque las personas perjudicadas pagan a los delincuentes. Para el ladrón el robo de automotores se ha convertido en un negocio, especialmente cuando encuentran al “cliente” indicado, que saben que no va a denunciar a la policía. Jorge M. D. quien sufrió el robo de su camioneta el mes pasado, dijo que para recuperarla pagó 1500 dólares. Acotando que no denunció debido a que no cree mucho en la justicia. La policía recomendó no caer en el juego de los robacarros, pues dijeron que si una persona se deja extorsionar una vez, se convierte en blanco fácil para los delincuentes, ya que le vuelven a robar y nuevemante debará pagar.