Mientras en el mercado de Tarqui no hay como abrirse paso entre la multitud, en el mercado de Los Esteros los espacios y locales vacíos acompañan a los pocos comerciantes que allí trabajan. Uno de ellos es Víctor Calderón, quien refirió que mientras los comerciantes de mariscos y de carne trabajaban allí era común ver a compradores en este sitio, donde ahora sólo reina la soledad entre cada uno de los mesones construidos en el centro de abastos.