A pesar de la prohibición de los talibanes, muchas mujeres de Afganistán arriesgan su seguridad para vender cabello y ganar algo de dinero en medio de la crisis.
En Afganistán, algunas mujeres venden su cabello en secreto para poder comprar alimentos y cubrir necesidades básicas. Aunque los talibanes lo han prohibido, esta práctica sigue siendo una de las pocas formas de conseguir dinero en un país con pocas oportunidades para las mujeres.
Fátima, una joven de 28 años de Kabul, recoge su propio cabello y el de sus familiares después de cada ducha. Cuando logra juntar unos cien gramos, lo vende por más de tres dólares. Este pequeño ingreso le permite comprar productos básicos para su hogar.
Antes de que los talibanes regresaran al poder en 2021, la venta de cabello era común. Los compradores solían ir directamente a las casas para recogerlo. Sin embargo, en 2024, una nueva ley prohibió esta actividad argumentando que vender partes del cuerpo atenta contra la dignidad humana.
Mujeres en Afganistán luchan para enfrentar la pobreza bajo el régimen talibán.
Las autoridades talibanas confiscan y queman las pelucas para hacer cumplir la ley. En enero, destruyeron casi una tonelada de cabello en la provincia de Kabul. A pesar de esto, muchas mujeres siguen vendiendo su cabello en secreto para sobrevivir.
Wahida, una viuda de 33 años, también depende de la venta de cabello. Desde que su esposo murió, se esfuerza por alimentar a sus tres hijos. Guarda el cabello de su hija de ocho años con la esperanza de venderlo, aunque teme ser descubierta por las autoridades.
La situación de las mujeres en Afganistán es cada vez más difícil. Los talibanes les han prohibido estudiar en la universidad, trabajar en la mayoría de los empleos y acceder a lugares públicos como parques y gimnasios. Además, cerraron los salones de belleza, quitando otra fuente de ingresos para muchas.
A pesar de las restricciones, estas mujeres siguen luchando por sobrevivir. La venta de cabello, aunque arriesgada, se ha convertido en una de las pocas opciones que tienen para ganar algo de dinero en medio de la crisis.
Yury Cobeña.