Los habitantes de lo que fue el mercado de Tarqui están preocupados.
Ellos aseguran que desde el 2016, luego del terremoto, varias viviendas quedaron vacías y otras fueron destruidas dejando terrenos baldíos.
El problema es que estos lugares están siendo utilizados por personas, especialmente migrantes, que han invadido las viviendas y los terrenos.
“La verdad es que los vecinos estamos muy preocupados porque quienes vivimos por acá nos encontramos todos los días con gente que llega a consumir drogas y a invadir casas”, expresó Jhon Vera, dirigente de la zona.
A esto se suma que en las últimas semanas se han registrado asaltos en el semáforo que se encuentra cerca del monumento El Pescador.
Delincuencia en Tarqui
Comerciantes y ciudadanos han denunciado que varias personas en motocicletas y a pie roban a los conductores que esperan el cambio del semáforo en rojo.
Lo hacen con pistolas y cuchillos.
Vera dijo que es necesario que la Policía haga rondas por la zona para controlar este problema.
Señaló que es urgente, pues en el sitio hay locales comerciales y restaurantes cuyas ventas se pueden ver afectadas por la delincuencia.
“En Tarqui estamos en proceso de reactivación y esperamos que nos ayuden con este problema”, expresó.
Luego de la tragedia del 2016, al menos 100 estructuras fueron afectadas en la zona, y ahora solo hay terrenos baldíos y edificios cerrados.
Y lejos de ver una salida, el problema se complica más.
Algunos de esos predios están siendo ocupados por mendigos, y en algunas casas y edificios ingresan los chamberos a llevarse lo que más pueden.
La zona comercial de Tarqui se concentraba en al menos nueve manzanas de la parroquia; desde la calle 101 a la 104, y de la avenida 106 a la 109.
Después del terremoto los negocios migraron a la zona del Nuevo Tarqui, en la avenida 24 de Mayo y avenida La Cultura.
El “Tarqui Viejo” quedó abandonado.
Xavier Briones, director de Control Territorial del Municipio de Manta, indicó que en la zona ya se realizan controles para desalojar a las personas que invaden los terrenos y las viviendas.
Señaló que en la zona de la estación de bomberos en Tarqui se han asentado varios migrantes que por varias ocasiones han sido desalojados, sin embargo regresan.
El funcionario dijo que también realizan vigilancia a través de las cámaras del sistema “Ojos de Águila” para controlar delitos en la zona.