Compártelo con tus amigos:

Enseñar trucos y habilidades a nuestras mascotas no solo mejora su comportamiento, sino que también fortalece el vínculo entre dueño y animal.

Desde habilidades básicas hasta trucos más complejos, el entrenamiento adecuado puede ser una experiencia divertida y enriquecedora tanto para el dueño como para la mascota. Perros, gatos e incluso animales más exóticos pueden aprender con paciencia, dedicación y una correcta metodología.

Según el veterinario Carlos Rivas, el entrenamiento no debe ser una tarea difícil o frustrante. “Es esencial usar métodos positivos, recompensando al animal por sus esfuerzos con golosinas, caricias o palabras de aliento. Los animales responden mejor cuando sienten que su esfuerzo es reconocido y valorado”.

Trucos sencillos para tu mascota

Los trucos más sencillos son un excelente punto de partida. Para los perros, las órdenes como “sentado”, “quieto” o “aquí” son esenciales para establecer una comunicación básica entre el dueño y la mascota. Para enseñarlos, se recomienda utilizar una combinación de refuerzos positivos y comandos verbales claros. Con paciencia y repetición, los perros aprenden a responder a estas órdenes en poco tiempo.

En el caso de los gatos, aunque tradicionalmente se considera que son menos inclinados al entrenamiento, pueden aprender trucos sencillos como “dar la pata” o “saludar”. Rivas asegura que “los gatos son muy inteligentes, pero necesitan un enfoque distinto. La clave está en ser pacientes y ofrecer premios que realmente disfruten, como sus golosinas favoritas.”

El experto también explica que uno de los aspectos más importantes al enseñar trucos a tu mascota es la consistencia. “Es necesario practicar regularmente, pero no excederse. Las sesiones de entrenamiento deben ser cortas, de unos 10 a 15 minutos, para evitar el agotamiento mental del animal. La repetición constante es clave para que el animal asocie una acción con una recompensa”, añade.

Desarrollando trucos más complejos

Una vez que el animal haya dominado las habilidades básicas, es hora de avanzar a trucos más complejos. Para perros, algunos trucos interesantes pueden incluir “dar vueltas”, “buscar el objeto” o “saltos a través de aros”. Estos trucos requieren más tiempo y paciencia, pero también son una excelente manera de mantener a tu mascota estimulada mentalmente.

“Es importante que el dueño sea creativo y utilice diferentes objetos, como pelotas o juguetes interactivos, para hacer el entrenamiento más dinámico y divertido”, comenta Rivas. Los perros también pueden aprender a realizar tareas más útiles, como abrir puertas o traer objetos específicos, lo que no solo estimula su mente, sino que también puede hacer la vida cotidiana más sencilla.

Más allá de los trucos y habilidades, entrenar a nuestras mascotas tiene beneficios adicionales. Ayuda a mejorar el comportamiento de los animales, reduce la ansiedad y fomenta un ambiente de convivencia más armonioso. “Los animales que son entrenados regularmente son menos propensos a desarrollar comportamientos destructivos, como morder objetos o ladrar en exceso”, concluye Rivas.

Kerlley Ponce