Ricardo Gareca presentó este martes su renuncia como seleccionador de Chile, luego de que el equipo quedara matemáticamente eliminado de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026. La decisión fue comunicada tras la derrota por 2-0 ante Bolivia en El Alto, resultado que selló el destino de La Roja a falta de dos fechas para el cierre del clasificatorio.
Un ciclo marcado por resultados adversos
La etapa de Ricardo Gareca al frente de la selección chilena duró poco menos de un año y estuvo marcada por un bajo rendimiento deportivo. En 17 partidos dirigidos, el combinado nacional solo logró 3 victorias, además de 4 empates y 10 derrotas. Esta racha negativa incluyó la eliminación en fase de grupos de la Copa América 2024.
En las Eliminatorias Sudamericanas, los números fueron igualmente negativos: 2 triunfos, 4 empates y 10 derrotas, con 9 goles a favor y 24 en contra, lo que representa un diferencial de -15. El equipo sumó apenas 5 puntos de 27 posibles, un registro que selló su exclusión de la próxima cita mundialista.
Declaraciones de Ricardo Gareca tras su renuncia
Gareca, visiblemente afectado por la situación, habló en rueda de prensa tras el partido disputado en la ciudad boliviana de El Alto. “Tuvimos una reunión en el vestuario con los dirigentes, con todos, y luego con los jugadores y la delegación. Les comunicamos que queríamos descomprimir esto”, señaló.
El entrenador argentino agregó: “Intentamos pelear todo. Quiero agradecer a todos por el respaldo”. Reconoció que la eliminación fue “un golpe duro” tanto para él como para el plantel, pero aseguró que la selección “sabrá levantarse”. Su salida fue comunicada formalmente por la Federación de Fútbol de Chile (FFC). La Roja ahora deberá buscar un nuevo cuerpo técnico de cara a los próximos compromisos internacionales.
La Roja ante un nuevo punto de inflexión
La crisis de resultados en la selección chilena no es reciente. Desde su última participación mundialista en 2014, el equipo ha enfrentado un relevo generacional complejo, sumado a cambios constantes de entrenadores y falta de continuidad en los procesos. Con la salida de Gareca, La Roja suma su cuarto cambio de técnico en menos de cinco años. La Federación deberá ahora definir si opta por un perfil extranjero o por un proyecto local que promueva nuevas generaciones de futbolistas.
En el entorno del fútbol chileno, la expectativa gira en torno a quién podrá asumir el reto de reconstruir el proyecto deportivo nacional, renovar el plantel y reinsertar a Chile en el mapa competitivo del fútbol sudamericano. La selección chilena enfrentará en los próximos meses amistosos internacionales y deberá presentar una hoja de ruta clara que defina metas a corto y mediano plazo. Por ahora, el interinato técnico sería asumido por algún miembro del cuerpo técnico actual o por entrenadores de divisiones menores.