Entre enero y abril de 2025, el Registro Civil registró 7 504 divorcios frente a 14 092 matrimonios, lo que significa que una de cada dos uniones legales culmina en ruptura, según cifras oficiales de la institución.
Las cifras de los divorcios y su significado
El balance registra una bajada comparada con el mismo periodo de 2024, cuando se documentaron 8 285 divorcios de enero a abril. Sin embargo, la proporción se mantiene: cada dos matrimonios hay un divorcio.
Más allá de los datos, este fenómeno revela una transformación en cómo la sociedad ecuatoriana enfrenta el fin de una relación legal. Muchas parejas cuestionan el matrimonio como única alternativa y optan por el bienestar individual.
Presiones económicas y estrés en el hogar
Las dificultades económicas explican entre el 30 % de los divorcios. Las deudas acumuladas contribuyen notablemente a la decisión de separarse . De hecho, investigaciones internacionales, como un estudio de la Universidad de Kansas, confirman que las tensiones financieras se reflejan en la convivencia y precipitan rupturas.
En un contexto donde la economía decrece —con crecimiento negativo estimado para 2024— ambos cónyuges afrontan mayores responsabilidades, lo que intensifica los conflictos domésticos y emocionalmente desgastantes.
Los divorcios también se dan por comunicación deficiente
Los psicoterapeutas ecuatorianos atribuyen al menos un 20 % de los divorcios a la falta de comunicación, la apatía emocional o la infidelidad, causas generalmente entrelazadas.
Además, según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), la edad promedio al casarse es más tardía (36 años hombres, 33 mujeres), lo que implica que muchas parejas afrontan etapas de madurez personal con expectativas distintas.
La convivencia prolongada puede generar desgastes no previstos, especialmente en parejas que no afrontaron previamente los retos de compartir largas etapas de vida.
Cambio cultural, autonomía y mutuo consentimiento
El 79,5 % de los divorcios en 2024 se resolvió por mutuo consentimiento, de acuerdo al INEC. Esta modalidad refleja una sociedad que valora la ruptura pactada, más que el estigma.
El empoderamiento femenino y el acceso al empleo han aumentado la independencia emocional, reduciendo la tolerancia a relaciones insatisfactorias .
Incluso la distribución geográfica revela que la Sierra concentra más rupturas legales, lo que sugiere menores presiones sociales para mantenerse casados en zonas urbanas.
El aumento de divorcios en Ecuador se explica por una compleja interacción: presiones económicas, desgaste por comunicación deficiente y cambios culturales que legitiman la ruptura emocionalmente pactada.
Las cifras oficiales —7 504 divorcios entre enero y abril 2025— junto con el predominio del mutuo consentimiento, indican que la sociedad ecuatoriana redefine sus vínculos, priorizando bienestar, autonomía y relaciones más equitativas (21).
¿Por qué julio es el mes en el que más se registran divorcios en Ecuador, de acuerdo al INEC?