El agua dulce está desapareciendo a un ritmo alarmante en el mundo

Nuevos datos satelitales revelan una pérdida acelerada de agua dulce en el mundo, con megasequías, agotamiento de acuíferos y serias consecuencias futuras.

•‎

4 minutos de lectura
Estudio revela pérdida global sin precedentes de agua dulce desde 2002
Estudio revela pérdida global sin precedentes de agua dulce desde 2002

Gabriela Mantuano

Redacción ED.

Gabriela Mantuano

Redacción ED.

Nací en Manta, Manabí, el 24 de julio de 1989. Licenciada en Ciencias de la Comunicación en la UL... Ver más

Una pérdida global sin precedentes de agua dulce ha sido documentada desde 2002 por científicos de la Universidad Estatal de Arizona (ASU), quienes alertan que el fenómeno, impulsado por el cambio climático, el uso excesivo de aguas subterráneas y sequías extremas, amenaza la seguridad hídrica mundial. El estudio, publicado en Science Advances, utiliza más de 20 años de observaciones satelitales y confirma que el 75 % de la población mundial vive en países que han perdido agua dulce en las últimas dos décadas.

Un nuevo mapa de megasequías

El análisis, basado en los satélites GRACE y GRACE-FO, identificó cuatro zonas de megasequedad en el hemisferio norte:

  • Suroeste de Norteamérica y América Central,
  • Alaska y norte de Canadá,
  • Norte de Rusia,
  • Oriente Medio y norte de África.

Estas regiones presentan tendencias alarmantes de pérdida de humedad en el suelo, glaciares, nieve y aguas subterráneas.

El estudio advierte que las zonas terrestres secas se expanden cada año a una velocidad equivalente a dos veces el tamaño del estado de California, y que la aridez avanza más rápido que la humidificación de zonas húmedas, alterando los patrones hidrológicos globales tradicionales.

68 % de la pérdida es agua subterránea

Por primera vez, los investigadores pudieron cuantificar el origen de la pérdida hídrica global:
El 68 % del agua dulce desaparecida proviene de acuíferos subterráneos, una fuente considerada no renovable a corto plazo. Esta pérdida supera incluso la contribución al aumento del nivel del mar de las capas de hielo de Groenlandia y la Antártida combinadas.

“El mensaje no puede ser más claro sobre el impacto del cambio climático en nuestros recursos hídricos”, señaló Jay Famiglietti, profesor de la Escuela de Sostenibilidad de la ASU y autor principal del estudio.

El investigador Hrishikesh A. Chandanpurkar agregó que se está agotando “agua fósil”, una reserva natural que debería usarse solo en casos extremos, como sequías prolongadas, pero que hoy está siendo utilizada sin reposición.

Punto de inflexión: El Niño y uso acelerado

Los datos satelitales también revelaron un punto de inflexión en 2014-2015, coincidiendo con un fuerte evento de El Niño. Desde entonces, la aceleración en los eventos climáticos extremos ha intensificado la extracción de aguas subterráneas, lo que llevó a una desecación continental mayor a la fusión de hielos y glaciares.

Además, los científicos identificaron una oscilación inédita: antes de 2014, las zonas secas predominaban en el hemisferio sur, mientras que las húmedas se concentraban en el norte. Luego de ese año, la tendencia se invirtió.

El estudio señala también que solo los trópicos han mantenido una tendencia de aumento de humedad, algo que no había sido previsto por los modelos climáticos del IPCC, lo que sugiere que algunos patrones hídricos reales no están aún bien representados en las proyecciones futuras.

Impactos sociales, agrícolas y ambientales

La investigación plantea que esta pérdida sostenida de agua dulce tiene implicaciones críticas para la agricultura, la salud pública, la estabilidad económica y el aumento del nivel del mar.

La escasez de agua amenaza el suministro en múltiples regiones y podría desencadenar crisis humanitarias, desplazamientos masivos y conflictos por recursos hídricos en zonas vulnerables.

Asimismo, el continuo agotamiento de acuíferos profundos dificulta el acceso al agua potable, especialmente en regiones donde la superficie ya ha sido desertificada o donde las fuentes superficiales han sido contaminadas.

Llamado urgente a la acción

El estudio refuerza la necesidad de adoptar políticas sostenibles de gestión del agua. Los investigadores subrayan que los sistemas de aguas subterráneas no están siendo recargados, ni siquiera durante los años húmedos, lo que plantea una quiebra inminente del agua dulce.

“Los glaciares y acuíferos son como fondos fiduciarios milenarios que estamos agotando irresponsablemente”, advirtió Chandanpurkar. Los científicos insisten en que monitorear los cambios hídricos a largo plazo es clave para predecir futuras crisis y adaptar la infraestructura hidráulica global.

Las observaciones continuas de las misiones GRACE son vitales para proporcionar una imagen precisa del almacenamiento de agua terrestre, que incluye humedad del suelo, nieve, hielo y acuíferos profundos.

SÚMATE AL NEWSLETTER

Recibe todos los días el ranking de las noticias más importantes.

ÚLTIMAS NOTICIAS

Edición impresa

ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP

¡Noticias al instante!

Entérate de lo más importante, al momento.

ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP

¡Noticias al instante!

Entérate de lo más importante, al momento.

ÚLTIMAS NOTICIAS

Edición impresa

Noticias en la web

SÚMATE AL NEWSLETTER

Recibe todos los días el ranking de las noticias más importantes.

Edición impresa

ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP

¡Noticias al instante!

Entérate de lo más importante, al momento.

1$us/mes

No te pierdas nada OFERTA RELÁMPAGO