Médicos de la Clínica Internacional de Especialidades de Mexicali (México), le cortaron la oreja a un bebé recién nacido durante una cesárea que realizaron con las linternas de tres celulares, pese a que la madre insistió que no la operaran así. Las víctimas de esta historia son Karla Araceli y su hijo Julián Adriel.

Según el testimonio de la familia afectada, el 6 de junio del 2022, Karla ya estaba en el quirófano para que le practiquen la cesárea cuando de un momento a otro se fue la luz.

Tras el inconveniente, la mujer, que ya estaba anestesiada, le pidió al médico David Santoyo que no quería operarse.

“No me quiero operar así, sin luz, tengo mucho miedo. No me quiero morir”, le dijo.

Sin embargo, eso no impidió que Santoyo realizará la cesárea e incluso, para tranquilidad de los familiares, mintió al decir que el hospital tenían una subestación de energía eléctrica para abastecerse. También le había prometido al padre del niño, Julián Solís, que lo dejaría pasar, pero no ocurrió.

Cuando el bebé nació no fue mostrado a su mamá. Luego de unas horas el doctor le dijo a los padres que no sabían si en el procedimiento le cortaron la oreja al niño o si nació con una tumoración benigna, pero que él ya se la había reconstruido y les había ahorrado casi 1.500 dólares.

La cesárea con la luz de los tres celulares fue grabada por los mismo doctores que participaron en la cirugía.