El domingo 29 de diciembre, un sicario mató a un pastor y a dos miembros de su familia en un restaurante de Aguachica, Cesar, Colombia. El atacante llegó en motocicleta y disparó contra las víctimas, quienes estaban almorzando.
Testigos indicaron que el ataque podría haber estado destinado a otra persona, pero la familia fue la que resultó afectada. En medio del caos, los comensales y transeúntes buscaron refugio mientras el agresor disparaba. Solo uno de los presentes, el hijo de 19 años, fue trasladado a un centro médico.
Las víctimas eran Marlon Lora, su esposa Yorley Rincón y sus hijos Ángela y Santiago Lora Rincón. La familia era conocida en la comunidad por su labor en la iglesia Príncipe de Paz, donde Marlon era pastor. La tragedia ha conmocionado al municipio, que lamenta la pérdida de esta familia respetada.
Ángela, la hija mayor, había compartido un mensaje de fe durante una misa transmitida en Facebook el mismo día del ataque. En su discurso, destacó la importancia de tener «los ojos puestos en lo eterno». Horas después de su muerte, se viralizó un video donde hablaba sobre su vida centrada en Jesús.
Las autoridades investigan el ataque y han establecido una recompensa de 25 millones de pesos por información sobre los responsables.
La Gobernación del Cesar y la Alcaldía han rechazado este acto violento. «Sicario mató a un pastor», pero no podemos permitir que esto nos robe la esperanza. El presidente Gustavo Petro exigió a la Policía avanzar en las investigaciones para llevar a los culpables ante la justicia.
