El desbordamiento del río Chico en Calderón, Portoviejo, ha dejado a miles de familias atrapadas entre el agua y la desesperación. La falta de asistencia y el daño estructural agravan la situación.
Este lunes 24 de febrero de 2025, la parroquia Calderón, en Portoviejo, provincia de Manabí, quedó sumergida en el caos tras el desbordamiento del río Chico. Las calles, casas y comercios fueron arrasados por las aguas, dejando a cientos de familias en total desamparo.
Desde la madrugada del lunes, el río Chico desbordó su cauce y comenzó a inundar los barrios de Calderón, como Luz y Vida. Las familias han quedado atrapadas en sus casas, rodeadas de agua. La situación en las calles es alarmante: los vehículos no pueden circular, y las viviendas de las zonas más afectadas, como la calle Santa Lucía, están completamente sumergidas. Al menos 17 hogares han quedado bajo el agua, con pérdidas materiales incalculables.
A medida que las aguas suben, la situación se agrava. Los problemas de alcantarillado colapsado han provocado que las pozas sépticas se desborden, esparciendo heces fecales por las calles. Este riesgo sanitario, sumado al agua estancada, genera condiciones insostenibles para los habitantes. Mientras tanto, la desesperación crece: «Nadie ha venido a socorrernos, estamos solos», expresó Ramón Briones, uno de los afectados.
Ausencia de ayuda y abandono
Pese a la magnitud de la catástrofe, los habitantes de Calderón aseguran que no han recibido asistencia significativa. Solo el presidente del GAD parroquial, en conjunto con la dirección de Riesgos del municipio, ha señalado que se están recopilando datos sobre los daños. La falta de respuesta de las autoridades ha generado aún más frustración entre los residentes, quienes han perdido no solo bienes materiales, sino también la esperanza de recibir ayuda.
El desbordamiento del río Chico es un fenómeno recurrente en la región, pero este 2025 la magnitud de las lluvias ha sido mucho mayor que en años anteriores. Las intensas precipitaciones en las últimas semanas, combinadas con el mal estado de las infraestructuras de drenaje, han generado las condiciones para esta tragedia. Según el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI), las precipitaciones en la región de Portoviejo han sido significativamente superiores a las del mismo mes en 2024, lo que agrava la vulnerabilidad de las áreas rurales.
Las inundaciones en Calderón y el desbordamiento del río Chico en Portoviejo han dejado una estela de destrucción. La falta de ayuda oficial, la creciente desesperación en Calderón y el colapso sanitario aumentan la gravedad de la situación. La crisis en esta parroquia rural resalta la urgente necesidad de mejorar las infraestructuras y la respuesta ante emergencias en Manabí.
Así se encuentra la parroquia Abdón Calderón tras el desbordamiento del río Chico
