Erik Prince, exmilitar estadounidense y fundador de Blackwater, participó en un megaoperativo en Guayaquil, acompañando a los ministros de Defensa y del Interior en una acción que dejó 68 detenidos. Su breve visita, centrada en asesoría en seguridad, levanta cuestionamientos sobre la estrategia del Gobierno de Daniel Noboa contra el narcoterrorismo.
Prince arribó a Ecuador el 5 de abril de 2025 y participó en el operativo Apolo 13 en el suburbio de Guayaquil, acompañado por los ministros Gian Carlo Loffredo (Defensa) y John Reimberg (Interior). El Ministerio de Defensa destacó su presencia como un “capítulo histórico” para la seguridad, publicando imágenes de Prince en una tanqueta militar y en allanamientos que incluyeron clínicas de rehabilitación clandestinas. La operación resultó en 68 detenciones y el decomiso de 15 armas de fuego, municiones, vehículos robados y drogas, según la Policía Nacional.
En un video difundido por el Ministerio de Defensa, Prince enfatizó la necesidad de “inteligencia precisa” para operaciones efectivas contra el narcotráfico, afirmando que busca “hacer que los narcos teman ser atrapados”. También intervino en el contexto electoral, instando a votar por Daniel Noboa en las elecciones del 13 de abril, advirtiendo que la alternativa podría convertir a Ecuador en un “narcoestado como Venezuela”. Esta declaración generó críticas por injerencia extranjera.
El 6 de abril, Prince visitó el puerto de Guayaquil, observando operaciones desde una sala de monitoreo, según el Ministerio de Defensa. Esa noche, en una entrevista junto a Loffredo, destacó la importancia de perfeccionar las capacidades de las “unidades de élite” con asesorías externas. Tras estas apariciones, no hubo más reportes oficiales sobre su agenda, y una fuente policial confirmó a Ecuavisa que Prince abandonó el país días después.
Rol de Prince y falta de claridad
El 1 de abril, Loffredo anunció que Prince y su equipo brindarían asesorías y capacitaciones en seguridad, sin limitarse a estos roles. Sin embargo, fuentes del Bloque de Seguridad revelaron a Televistazo que no se convocaron cursos ni talleres, y la presencia de Prince en patrullajes, sin equipo de protección, sorprendió a los oficiales. Los Consejos de Generales de las Fuerzas Armadas y la Policía no fueron informados de reuniones con él, y el portal de compras públicas no registra contrataciones por asesorías.
Loffredo explicó que Prince operaría en el “nivel táctico-operacional”, donde los planes se ejecutan, pero la falta de detalles sobre su rol alimentó las críticas. El experto en seguridad Renato Rivera cuestionó la claridad de los acuerdos, advirtiendo sobre el riesgo de “privatizar” la lucha contra el crimen organizado. Rivera sugirió que el Gobierno debería priorizar la investigación criminal y aprender de experiencias como la de Italia contra la mafia.
Cooperación internacional en seguridad
Además de Prince, el Gobierno de Noboa fortaleció la cooperación con Estados Unidos. El 3 de abril, Reimberg y Loffredo concretaron acuerdos en Washington para obtener recursos contra el narcotráfico y el terrorismo. Congresistas estadounidenses como Mario Díaz-Balart y María Elvira Salazar destacaron la colaboración bilateral. También se firmó un convenio con la Universidad Internacional UNIVERSAE de Costa Rica para capacitar a la Policía, y se reafirmó el compromiso con el Comité Interamericano contra el Terrorismo (CICTE).
La participación de Prince, cuya empresa Blackwater (hoy Constellis) fue señalada por la matanza de civiles en Irak en 2007, generó rechazo. En X, usuarios como @fausthe1 acusaron a Prince de experimentar con Ecuador como “campo de prueba” para su negocio, mientras @socialholico criticó el uso de recursos públicos para su contratación. Por otro lado, @eduardomenoni y @ElDatoEcua celebraron su llegada como un refuerzo contra el narcoterrorismo.
Ecuador enfrenta una crisis sin precedentes, con un promedio de un homicidio por hora en 2025, según el Ministerio del Interior. Desde 2024, el país está en conflicto armado interno, con 22 bandas clasificadas como organizaciones terroristas por Noboa. Guayaquil, epicentro del narcotráfico, reportó 1,500 homicidios en los primeros dos meses de 2025. Operativos como Apolo 13 buscan desarticular redes vinculadas a cárteles mexicanos y la mafia albanesa. Sin embargo, persisten dudas sobre la efectividad y transparencia de las estrategias.