Le llamaremos Ana Patricia, una mujer que estuvo a poco de ser víctima de estafa, con el denominado “cambiazo”.
Como todos los viernes, salió hacia el mercado a comprar comida, pero esta vez junto a su hija de siete años.
Mientras cargaba sus fundas de verduras y carnes, decidió comprar unas camisetas para sus otros hijos. En ese momento su pequeña acompañante se agachó y encontró un anillo.
Se lo mostró a Ana Patricia y de inmediato, por detrás, sintió que una mujer le puso la mano en el hombro y le dijo: “Esa sortija es del hombre que va adelante, el de gorra café”.
La mujer de cabello castaño y vestido floreado empezó a decirle a Ana Patricia que no devolviera el aro, ya que era de oro, sino que se lo vendiera al que supuestamente era el dueño.
Mientras intentaba buscar la forma de cómo cargar las fundas y no soltar a su hija, se percató de que un hombre se acercó y le dijo que le vendiera el anillo.
Le ofreció 150 dólares en efectivo y 100 más, pero tenía que ir al banco a retirar el dinero.
Ana estaba confundida al ver que la mujer se hacía pasar por su hermana e intentó llegar a un acuerdo con el “dueño” por la venta del anillo.
Le hizo oferta por el anillo
El hombre se acercó a ellas y les hizo una nueva oferta: 200 dólares en efectivo y 150 que debía retirar. Ana estuvo a poco de aceptar, pero le hizo caso a su intuición y al hambre de su hija, quien estaba desesperada por irse a casa. Le devolvió el anillo a la mujer y dejó que entre ellos arreglaran.
Ana Patricia tomó un taxi y empezó a asimilar lo que le había ocurrido. Llegó a casa asustada y le conversó a su esposo lo sucedido. Allí entendió que estuvo a poco de ser estafada.
Esta es una de las más comunes y conocidas. Bajo este método engañan y roban a las personas.
Los robos bajo la modalidad de cambiazo ocurren en los sitios con aglomeración de personas como los mercados.
