El presidente Nayib Bukele ha lanzado un ambicioso proyecto que involucra a los reclusos en la construcción de viviendas y otras tareas productivas como parte del “Plan Cero Ocio”.
Desde su reciente juramento presidencial el 1 de junio, Bukele, quien ganó con un abrumador 85% de los votos, se ha comprometido a revitalizar la economía nacional.
Aunque se ha proclamado que el país “se ha curado de las pandillas“, no se tiene la intención de disminuir las medidas contra la delincuencia, incluyendo el “Plan Cero Ocio”.
Esta iniciativa busca que los reclusos, bajo el nuevo sistema penitenciario, participen en labores como la limpieza de calles, playas y la reparación de instituciones públicas.
Según datos oficiales, más de 2 mil presos en fase de confianza se incorporan diariamente a estas actividades, como borrar grafitis o contribuir en la rehabilitación de infraestructuras.
“Se han creado las condiciones necesarias para que el 100 % de los privados de libertad se discipline en actividades productivas”, destaca uno de los informes gubernamentales.
Los objetivos principales incluyen mejorar la disciplina y el orden en los centros penitenciarios, así como facilitar la reintegración de los reclusos a la sociedad y reducir la reincidencia delictiva.
Según la periodista Marianne Schmidt, de Meganoticias, “el 100% de los centros penitenciarios permite que los reclusos se especialicen en actividades como pintura o zapatería”.
Samuel Díaz, director del Centro Industrial, explicó que los presos seleccionados no tienen afiliaciones con pandillas ni organizaciones criminales, por ello los elegen por sus habilidades previas y las adquiridas durante su encarcelamiento.
