Más de un millar de piezas de caparazones de tortugas marinas en peligro de extinción, pintadas de azul y descritas como plástico para evadir las autoridades aduaneras y ambientales, fueron decomisadas en el Aeropuerto Internacional de Miami.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) señaló este jueves que se trata de caparazones de por lo menos un centenar de tortugas que provenían del Caribe e iban en tránsito hacia Asia.
El Servicio de Pesca y Vida Silvestre (FWS) de Estados Unidos subrayó además que se trata de uno de los decomisos de partes de tortugas marinas más grande.
Ambas agencias federales indicaron que el decomiso ocurrió el año pasado, que se trata de una investigación en curso y que por ahora no hay detenidos.
Señalaron que el envío fue interceptado gracias a un esfuerzo de varias autoridades para interrumpir y desmantelar las redes de tráfico.
"El comercio ilegal de vida silvestre es una amenaza mortal para la vida silvestre en todo el mundo", manifestó Aurelia Skipwith, directora de FWS.
Señaló que la agencia trabaja con socios de todo el país y el extranjero "para proteger la vida silvestre y garantizar que el tráfico de vida silvestre no impida que las generaciones futuras disfruten de la belleza y diversidad de la naturaleza".
El FWS precisó que los inspectores de vida silvestre encontraron dos especies de tortugas marinas: tortugas carey y tortugas marinas verdes.
Señaló que las tortugas marinas se encuentran entre los animales silvestres más amenazados del mundo.
"Una vez abundantes, las poblaciones de tortugas marinas en los océanos Índico, Atlántico y Pacífico han disminuido, en gran parte debido a la degradación del hábitat y el comercio ilegal de vida silvestre", indicó la agencia. EFE