Al menos 21 personas han resultado heridas, ninguna de consideración, y más de 3.500 personas han tenido que ser evacuadas de sus hogares en varias provincias de Turquía, en Esmirna especialmente.
Esto tras la aparición en los últimos días de más de 70 incendios, de ellos casi una treintena sin control.
El ministro de Agricultura y Silvicultura, Ibrahim Yumakli, confirmó este sábado 72 focos, de ellos 27 todavía pendientes de dominar.
Esto ha provocado la evacuación de 3.583 personas en Esmirna, Aydin, Bolu, Mugla y Manisa.
Al menos seis personas quedaron detenidas por un “presunto sabotaje” relacionado con los incendios forestales. Dos de ellas en Esmirna y cuatro en la ciudad noroccidental de Bolu, añadió Yumakli.
Los datos recogidos por el diario ‘Hurriyet’ a partir de imágenes por satélite de la NASA revelan más de 5.000 hectáreas afectadas por las llamas, alimentadas por vientos de aproximadamente 80 kilómetros por hora.
Las tareas de contención incluyen a 596 vehículos y casi 3.000 efectivos.
Las altas temperaturas con baja humedad y fuertes vientos, que han facilitado la expansión de los incendios en Turquía, continuarán durante los próximos días, advirtió Yumakli. Por ello rogó a la ciudadanía “no encender ni una cerilla” al aire libre y mantener una alerta máxima.
El alcalde de Esmirna, Cemil Tugay, ha indicado que los incendios han dejado al menos 21 heridos, ninguno de gravedad.
Entre ellos hay seis bomberos y un agente de Policía que están recibiendo tratamiento.