Un sismo de magnitud 7,1 con un epicentro muy cercano al balneario de Acapulco sacudió este martes el centro y sur de México, sin que hasta el momento se reporte pérdida de vidas humanas.
El temblor se produjo a las 20h47, con origen a 14 kilómetros al sureste de Acapulco, en el sureño estado de Guerrero, de acuerdo con un reporte preliminar del Servicio Sismológico Nacional que en primera instancia dijo que el movimiento tuvo una magnitud de 6,9.
Se sintió fuerte en Puebla, Hidalgo, Veracruz, Guerrero otros estados y ciudades.
En declaraciones a Milenio TV, el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, afirmó que el sismo se “sintió muy fuerte” y la gente está “bastante alarmada”.
Pero indicó que por el momento no hay reportes “de gravedad” y pidió a la ciudadanía tener “cuidado” por las posibles réplicas.
Asimismo, el Centro de Alerta de Tsunamis de la Secretaría de Marina notificó que no se espera la generación de un tsunami en la zona costera.
De acuerdo al reporte preliminar no hay daños en edificios, pero sí afectaciones en redes de energía eléctrica y tuberías de gas.
En al menos tres municipios de Ciudad de México no hay energía. Están activados los protocolos de seguridad.
Hay gente atrapada en las góndolas del “cable bus”, sistema de transporte aéreo, informaron las autoridades.
El terremoto activó la alerta sísmica en la Ciudad de México, donde miles de personas salieron de casas y edificios como medida de seguridad y prevención, y donde en varios barrios se han producido cortes de electricidad.
“El secretario de Seguridad Ciudadana (Omar García Harfuch) está sobrevolando (la ciudad). Hasta el momento no se reportan daños graves. Seguimos informando”, indicó la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, en un mensaje en Twitter.
Posteriormente, García Harfuch informó que hay cortes de luz en algunos barrios de la ciudad y el servicio de metro funciona con normalidad y, por el momento, no hay reportes más relevantes.
El sismo de esta noche ocurrió en la misma fecha en la que hace cuatro años -el 7 de septiembre de 2017- se registró un terremoto de magnitud 8,2 el cual tuvo su epicentro en el Golfo de Tehuantepec y afectó principalmente los estados de Oaxaca y Chiapas, donde 98 personas perdieron la vida. EFE