El asambleísta Santiago Díaz está bajo prisión preventiva. Se le acusa de presunta violación a una niña de 12 años. La supuesta violación ocurrió en diciembre de 2024. Sin embargo, la denuncia se formalizó el 8 de julio de 2025. La demora se debió al miedo de la menor y su familia.
La audiencia de formulación de cargos se realizó el martes 22 de julio. Tuvo lugar en la Unidad Judicial de Violencia contra la Mujer y la Familia No. 1 en Quito. La Fiscalía presentó 25 elementos de convicción.
Elementos clave del caso
Entre las pruebas presentadas se encuentran el testimonio anticipado de la víctima. También se incluyeron las versiones de sus padres y hermana. Estas versiones coinciden con el relato de la menor. Un informe de pericia ginecológica fue crucial. Documentos de la Asamblea Nacional confirmaron la condición de legislador de Díaz. Los partes policiales de los allanamientos también fueron presentados. Las autoridades incautaron teléfonos celulares, credenciales y una memoria flash del domicilio de Díaz.
Con estas pruebas, la jueza encontró indicios suficientes. Determinó que existía una “conducta delictiva”. Por ello, ordenó prisión preventiva contra Díaz. Deberá cumplir la medida en la Cárcel 4 de Quito.
Medidas judiciales y agravantes
La jueza también dispuso la prohibición de enajenar bienes. Otorgó medidas de protección para la víctima. Esto se hizo conforme al artículo 558 del Código Orgánico Integral Penal (COIP). El fiscal del caso explicó la decisión. No había garantías de que Díaz compareciera. Él evadió la justicia por varios días. Finalmente, se entregó voluntariamente el 21 de julio. Esto ocurrió tras una orden de localización y captura.
El delito de violación está tipificado en el artículo 171 del COIP. Contempla penas de entre 19 y 22 años de prisión. Estas penas aplican cuando la víctima es menor de 14 años. Las sentencias pueden aumentar con agravantes. La instrucción fiscal tendrá un plazo de 60 días.
Impacto político
Díaz fue elegido por la bancada de la Revolución Ciudadana. Su caso generó un fuerte impacto político en su organización. El líder del movimiento, el expresidente Rafael Correa, calificó el caso de “vergüenza”. Pidió disculpas a la víctima y su familia. Tras conocerse la denuncia, Díaz fue expulsado de la bancada de la Revolución Ciudadana.