Dormir más de ocho horas por noche puede ofrecer beneficios como una mejor recuperación física, pero también implica riesgos para la salud cardiovascular y cognitiva, según investigaciones científicas recientes. Expertos en Ecuador y el mundo han estudiado cómo el exceso de sueño afecta a adultos, destacando la importancia de equilibrar la duración del descanso para optimizar el bienestar.
Un sueño adecuado es fundamental para la salud física y mental, pero ¿qué ocurre cuando se duerme más de lo recomendado? Estudios científicos, incluidos algunos realizados en Ecuador, señalan que superar las ocho horas de sueño diarias puede tener efectos tanto positivos como negativos. La Fundación Nacional del Sueño de Estados Unidos recomienda entre siete y nueve horas de sueño para adultos, pero investigaciones locales y globales advierten sobre los riesgos de excederse.
En un estudio publicado en 2022 en la revista Nature Ageing, basado en datos de 500,000 adultos, se encontró que dormir más de siete horas está asociado con un deterioro cognitivo a largo plazo, especialmente en adultos mayores. Aunque no se realizó en Ecuador, los resultados son relevantes para la población local, ya que el envejecimiento cerebral es un fenómeno universal. Dormir en exceso puede interferir con la eliminación de proteínas dañinas en el cerebro, aumentando el riesgo de enfermedades como el Alzheimer.
Beneficios del sueño prolongado
Dormir más de ocho horas puede beneficiar la recuperación física. Durante el sueño, el cuerpo repara tejidos, produce proteínas esenciales y fortalece el sistema inmunológico, según un artículo de Sleep (2023). En Ecuador, un estudio de la Universidad de Cuenca (2021) analizó a 300 adultos y encontró que quienes dormían entre ocho y nueve horas reportaban menos fatiga y mejor rendimiento físico en actividades diarias. Este beneficio es notable en personas con alta demanda física, como deportistas o trabajadores manuales.
Además, el sueño prolongado puede favorecer la liberación de hormonas como la del crecimiento, crucial para la regeneración celular. Sin embargo, investigadores advierten que estos beneficios disminuyen si el sueño excede las nueve horas.
Riesgos de dormir en exceso
Por otro lado, el exceso de sueño está relacionado con problemas de salud significativos. Un estudio global publicado en el European Heart Journal (2018) encontró que dormir más de ocho horas aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares en un 17% y de mortalidad prematura en un 41% en comparación con quienes duermen entre seis y ocho horas. En Ecuador, un análisis de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (2020) con 200 participantes confirmó que el sueño prolongado se asocia con mayor riesgo de hipertensión y obesidad, especialmente en mujeres.
Asimismo, dormir demasiado puede afectar la salud mental. Según el mismo estudio de la Universidad de Cuenca, las personas que dormían más de nueve horas reportaban mayor incidencia de síntomas depresivos. Esto se debe a que el sueño prolongado puede alterar el ritmo circadiano, afectando el estado de ánimo y la productividad.
Recomendaciones para un sueño saludable
Los especialistas recomiendan mantener un horario de sueño constante y evitar factores que alteren el descanso, como el uso de dispositivos electrónicos antes de dormir. En Ecuador, expertos de la Universidad de Cuenca sugieren limitar las siestas diurnas a 20 minutos y crear un ambiente oscuro y tranquilo para optimizar el sueño.
Autoridades sanitarias ecuatorianas promueven campañas sobre la importancia del descanso. Sin embargo, expertos enfatizan que cada persona debe ajustar su sueño según su edad y estilo de vida. Dormir más de lo necesario no siempre equivale a un mejor descanso.