La «Cruzada por el Patrimonio» de Ecuador comenzó esta semana en la provincia andina de Chimborazo, con el anuncio de la asignación de recursos para mejorar la infraestructura de la iglesia católica Balbanera, la primera construida en territorio ecuatoriano, en 1534, informó este sábado el Gobierno.
La intervención comprende el atrio, la sacristía, las baterías sanitarias, los muros del cerramiento, la cubierta de la iglesia, pisos y paredes, mantenimiento preventivo y correctivo a las instalaciones eléctricas, con un presupuesto referencial superior a los 97 mil dólares, indicó este sábado el Ministerio de Cultura y Patrimonio.
En un comunicado, la cartera de Cultura apuntó que los patrimonios tangibles e intangibles constituyen el mayor tesoro nacional.
Desde el oficio de los tejedores de paja toquilla hasta lugares patrimoniales como Balbanera o Sicalpa son fuentes de identidad, pero también de ingresos, «son referencias espirituales, pero además fijan hitos en el mapa turístico del país», anotó el Ministerio.
La ministra de Cultura y Patrimonio, María Elena Machuca, en compañía del alcalde de la localidad de Colta, Simón Bolívar Gualán, el mandatario de Chimborazo, Juan Pablo Cruz, la directora zonal del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural, Ximena Terán, y otras autoridades locales realizaron esta semana un recorrido que arrancó en Balbanera por la importancia histórica del lugar.
Machuca enfatizó que la preservación del patrimonio es posible siempre que todas las instituciones trabajen de forma articulada desde sus competencias.
Gualán agradeció el presupuesto comprometido para la intervención que se realizará en la Iglesia Balbanera.
El recorrido continuó hacia Sicalpa donde Marcos Cargua, presidente del cabildo, recibió el sello «Guardianes de la Cultura» y solicitó que el presupuesto participativo se invierta en la iglesia y sus alrededores.
Las ruinas de Sicalpa Viejo son Patrimonio Cultural de Ecuador, que «merece ser conservado y protegido con un proyecto que contemple la apropiación social del patrimonio, convirtiéndose en un factor de desarrollo cultural, social y económico», indica el comunicado del Ministerio. EFE
