La prefecta de Santo Domingo, Johana Núñez anunció, en diálogo con los representantes de la transportación provincial, la habilitación del kilómetro 83 de la vía Alóag-Santo Domingo. La reapertura será a partir de las 06h00 de este jueves 19 de junio de 2025. El paso será a un solo carril, una medida dispuesta para garantizar la seguridad de los usuarios tras las labores de estabilización del talud ejecutadas por el Consorcio RQR.
Protocolo de paso y seguridad vial
Junto al asesor jurídico de la Prefectura, William López, la autoridad provincial enfatizó el compromiso del Consorcio RQR para la apertura de la vía en la fecha establecida. López precisó que el paso se dará a un solo carril, buscando asegurar que “no les vaya a pasar nada” a los transportistas.
Para la definición detallada del protocolo de paso, este miércoles 18 de junio se llevó a cabo una reunión clave con los entes de control. Participaron la Policía Nacional y los Agentes Civiles de Tránsito de la Empresa Municipal de Transporte. El objetivo fue establecer un mecanismo de circulación técnico, controlado y responsable.
Galo Angulo, presidente de la Cámara Provincial de Transporte Pesado, expresó la preocupación de su gremio por la prolongación del cierre. Sin embargo, manifestó confianza en que el plazo otorgado al contratista se cumplirá y la vía estará nuevamente habilitada, beneficiando la transportación de carga.
Avance de obras y antecedentes de la intervención
La Prefecta Núñez reiteró que la obra en el kilómetro 83 tiene un plazo de seis meses y se encuentra en ejecución desde el 21 de abril. La intervención ha mostrado un avance significativo en la parte alta del talud. Allí se hizo la conformación de la cuneta de coronación y la construcción de una berma para mejorar la estabilización.
El kilómetro 83 de la vía Alóag-Santo Domingo ha sido históricamente uno de los tramos más complejos de la conexión vial entre la Sierra y la Costa. Tras los deslizamientos registrados en semanas previas, el Consorcio RQR inició una intervención técnica para estabilizar el talud.
A diferencia de ocasiones anteriores, se optó por una técnica más segura que no incluye el uso de explosivos: la aplicación de cemento expansivo o aditivos tipo Cras para fragmentar las rocas.
Técnica de fragmentación de rocas en la Alóag-Santo Domingo
Este método innovador consiste en perforar las rocas y aplicar un compuesto que, al expandirse, ejerce la presión necesaria para romper el material sin detonación. Los ingenieros de la empresa contratista recomendaron esta técnica, la cual fue validada por el equipo de fiscalización. La justificación técnica para evitar la dinamita es la prevención de fracturas adicionales en el terreno y la minimización de riesgos estructurales.
Según un informe técnico del 13 de junio, “el uso de aditivos expansivos para romper rocas es una alternativa segura y eficaz“. Este enfoque permite un mejor control de la fractura del talud sin generar vibraciones que puedan desestabilizar zonas vecinas.
Inicialmente, la vía estaba prevista para abrir el 14 de junio. Sin embargo, la Prefectura anunció la postergación de la apertura. El Consorcio RQR solicitó esta extensión debido a condiciones climáticas adversas y problemas imprevistos con la remoción de rocas, lo que llevó a reprogramar la habilitación para el jueves 19 de junio de 2025, a las 06h00.
Dificultades climáticas y monitoreo del talud
Los trabajos iniciaron con el cierre de la vía el 7 de junio. Se desplegaron tres frentes de trabajo y se removieron aproximadamente 1.500 metros cúbicos de roca en un área de 8.500 metros cuadrados. No obstante, las lluvias persistentes entre el 9 y el 12 de junio dificultaron el avance de la maquinaria y del personal en campo, según documentos oficiales de la obra.
Ante estos desafíos climáticos, el Consorcio RQR solicitó una ampliación del cierre por cuatro días adicionales. Esta solicitud fue aprobada por la administradora del contrato, Naomy Chum, priorizando la seguridad de los usuarios de la vía.
El geólogo Walter Molina, quien ha seguido de cerca la situación del talud, afirmó que si bien los trabajos ayudarán a disminuir los efectos de posibles deslizamientos, el riesgo no se elimina por completo. Molina recalcó: “Esta es una solución provisional y no definitiva. El sitio debe ser monitoreado constantemente porque es una zona geológicamente activa. La intervención disminuye el peligro, pero no lo anula”.
La técnica de cemento expansivo es cada vez más empleada en obras de minería, civiles y desmontes en áreas urbanas, precisamente por evitar los efectos colaterales de la dinamita. En el kilómetro 83, su aplicación previene explosiones que podrían debilitar aún más un talud con inestabilidad crónica.
Control y trabajos complementarios en la Alóag-Santo Domingo
La alternativa actual ofrece un control más preciso de la rotura del material, evitando daños colaterales en la estructura del talud y permitiendo la remoción progresiva del material rocoso. El informe del fiscalizador Fausto Ricaurte indicó que esta decisión técnica consideró el mayor volumen de roca inestable de lo inicialmente previsto.
Simultáneamente a los trabajos de explanación y remoción de rocas, se ejecutaron labores en la berma y la cuneta de coronación, ubicadas en la parte superior del talud. Estas obras buscan prevenir la filtración de agua de lluvia, una de las principales causas de la erosión y el debilitamiento del terreno (21).