El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, afirmó este jueves que su Gobierno trató de “asesinar” al líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, durante el conflicto abierto a mediados de este mes entre los dos países, si bien lamentó que el Ejército no tuvo “oportunidad” de llevar a cabo esta operación con éxito.
Israel no necesita “permiso” de Estados Unidos
“Israel buscaba asesinar a Jamenei durante la guerra, pero la oportunidad no se presentó”, indicó durante una entrevista con la cadena de televisión israelí Channel 13. “Si hubiese estado en nuestro punto de mira, nos lo habríamos quitado de en medio”, añadió.
Asimismo, recalcó que las fuerzas israelíes buscaban “eliminarlo”, si bien “no hubo oportunidad operacional alguna” para ello. “No necesitamos permiso alguno para tomar estas decisiones”, puntualizó al ser preguntado sobre una posible aprobación de Estados Unidos para esas acciones.
Irán destaca su “victoria”
Jamenei, por su parte, reapareció este mismo jueves para felicitar al país por la “victoria” ante Israel en el que fue su primer mensaje a la nación desde el alto el fuego alcanzado tras doce días de un conflicto desatado por la ofensiva lanzada el 13 de junio por el Ejército israelí, que deja de momento cerca de 630 muertos y más de 4.800 heridos.
“Expreso mis felicitaciones por la victoria sobre el falso régimen sionista“, dijo en su mensaje. Destacó que “pese a todo el ruido, el régimen sionista casi colapsó y fue aplastado por los golpes de la República Islámica”. “Los golpes infligidos contra el régimen por parte de la República Islámica no entraban en sus cálculos y su imaginación, pero así fue”, añadió.
Así inició el conflicto
El pasado 13 de junio estalló el conflicto armado entre Israel e Irán, desencadenado por ataques israelíes a instalaciones nucleares y militares iraníes, bajo la “Operación León Naciente”, con el objetivo de frenar el programa nuclear iraní, considerado una amenaza existencial. Irán respondió con misiles y drones contra ciudades israelíes, intensificando una “guerra en la sombra” previa.
Estados Unidos intervino el 22 de junio, bombardeando tres sitios nucleares iraníes, lo que llevó a un ataque iraní contra una base estadounidense en Catar. El conflicto, que dejó más de 220 muertos en Irán y 24 en Israel, generó temores de una guerra regional. Un frágil alto el fuego, negociado por Donald Trump, se estableció el 23 de junio, aunque ambos países se acusaron de violarlo. La comunidad internacional, incluida la UE y China, abogó por la diplomacia para evitar una escalada mayor.
El pasado 24 de junio, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reivindicó el fin del cruce de ataques con Irán como una “victoria histórica” del lado israelí. Además, advirtió que Israel actuará “con la misma determinación” si sospecha que las autoridades iraníes intentan en algún momento “restaurar” su programa nuclear con fines armamentísticos.