El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, abandonó ya la unidad de cuidados intensivos casi tres semanas después de estar internado en un hospital de Brasilia por fuertes dolores abdominales que derivaron el 13 de abril en una nueva operación intestinal.
El propio Bolsonaro anunció en redes sociales que pasó a planta y que está «clínicamente estable», «sin dolor» y adaptándose a una dieta líquida. No obstante, aclaró que los médicos siguen sin poner fecha a su posible alta hospitalaria.
Bolsonaro se recupera en el hospital DF Star de Brasilia de la sexta cirugía desde que en 2018 fue apuñalado durante un acto electoral. En esta última ocasión, la operación duró once horas para tratar una obstrucción intestinal vinculada a las secuelas de dicho ataque.
Así fue el atentado contra Jair Bolsonaro
El 6 de septiembre de 2018, a Jair Bolsonaro, entonces candidato presidencial, lo apuñalaron en el abdomen durante un acto de campaña en Juiz de Fora, Minas Gerais. El ataque, perpetrado por Adélio Bispo de Oliveira, dejó heridas graves en el hígado, pulmón e intestino, con una pérdida de 40% de su sangre.
Bolsonaro, de 70 años, fue operado de urgencia y trasladado al Hospital Albert Einstein en São Paulo, donde permaneció en cuidados intensivos. El agresor, diagnosticado con trastorno delirante paranoide, fue declarado no imputable y confinado en una institución mental.
Secuelas persistentes
Desde el atentado, Jair Bolsonaro ha enfrentado complicaciones recurrentes, incluyendo obstrucciones intestinales y hernias incisionales, que han requerido seis cirugías. La más reciente, realizada el 13 de abril de 2025 en el Hospital DF Star en Brasilia tras fuertes dolores abdominales, duró 12 horas.
Los médicos reportaron una recuperación lenta, con Bolsonaro en la UCI hasta hoy se trasladó a una unidad de internación. Según un comunicado médico, presentó gastroparesia y alteraciones hepáticas, pero su estado es estable, sin dolor ni fiebre.
Contexto del atentado
El ataque ocurrió en un contexto de polarización política durante la campaña presidencial. Jair Bolsonaro, líder de la derecha, ganó las elecciones de 2018 con 46% de los votos en la primera vuelta, pese a no poder retomar la campaña. Algunos analistas sugieren que el atentado fortaleció su imagen, aumentando su apoyo electoral. Bispo, exmilitante del PSOL, afirmó actuar por “orden de Dios”, pero investigaciones descartaron conspiraciones políticas.
Impacto actual
Bolsonaro, quien dejó la presidencia en 2023, sigue siendo una figura influyente. En publicaciones en X, expresó optimismo sobre su recuperación, afirmando: “Volveremos”. Sus seguidores han mostrado apoyo, mientras la prensa reporta que su salud podría afectar su actividad política ante un juicio pendiente en el Supremo Tribunal Federal.
