El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció en Washington D.C. que los aranceles a importaciones chinas, actualmente en 145%, se reducirán sustancialmente para fomentar negociaciones comerciales y mitigar el impacto económico en consumidores y empresas estadounidenses.
Declaraciones de Donald Trump
En una conferencia de prensa en la Casa Blanca, Trump señaló que los aranceles a bienes chinos “bajarán sustancialmente, pero no serán cero”. Esta declaración responde a comentarios previos del secretario del Tesoro, Scott Bessent, quien el mismo día afirmó que la guerra comercial con China es “insostenible” a largo plazo. Bessent, en una reunión privada con inversionistas en Washington, indicó que espera una “desescalada” en las tensiones comerciales en el “futuro cercano”.
El anuncio de Trump marca un cambio respecto a su postura inicial tras asumir su segundo mandato. El 2 de abril pasado el presidente impuso un aumento de aranceles al 145% sobre productos chinos como parte de su campaña “Liberation Day”, destinada a fortalecer la manufactura estadounidense.
La guerra comercial etre China y EE. UU.
La decisión llega en un momento de creciente presión económica. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), los aranceles han reducido las proyecciones de crecimiento global al 2.8% para 2025, desde un 3.3% en 2024. En Estados Unidos, la actividad empresarial cayó en abril a su nivel más bajo en 16 meses, impulsada por la incertidumbre tarifaria.
China, por su parte, ha respondido con aranceles del 125% a productos estadounidenses, afectando el comercio bilateral. Beijing también ha advertido a otros países contra reducir el comercio con China para obtener exenciones de tarifas estadounidenses, prometiendo “contramedidas recíprocas”.
Impacto en empresas y consumidores
El 5 de abril de 2025, entró en vigor un arancel base del 10% para todas las importaciones estadounidenses. Mientras que los aranceles a China se mantuvieron en 145%. Esto ha generado alzas de precios en bienes de consumo, con empresas como Verizon y 3M trasladando costos a los consumidores.
Sin embargo, Donald Trump otorgó exenciones temporales a ciertas industrias. Por ejemplo, el 11 de abril, productos electrónicos como los iPhones de Apple fueron excluidos de los aranceles, tras gestiones directas del CEO Tim Cook con la Casa Blanca. Otros sectores, como el comercio minorista y la agricultura, han solicitado alivio similar.
Negociaciones futuras
Donald Trump expresó optimismo sobre un posible acuerdo comercial con China, afirmando el 17 de abril que espera un “muy buen trato” en las próximas semanas. No obstante, analistas señalan que las negociaciones serán complejas, dado que China reforzó su posición en el comercio global y busca diversificar sus mercados de exportación.
El presidente también se reunió con ejecutivos de grandes minoristas en la Casa Blanca para abordar las preocupaciones sobre la cadena de suministro global, que se ha visto desestabilizada por los aranceles.