El marchista ecuatoriano Daniel Pintado quiere imitar a su compatriota Jefferson Pérez, primer campeón olímpico del país y con esa motivación irá a Asunción en busca de la medalla de oro en los próximos Juegos Suramericanos.
En una entrevista con Efe, Pintado dijo que Pérez es el responsable de que desde niño se “enamorara” de la marcha, gracias a su medalla de oro conquistada en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 y a la de plata en Pekín 2008.
Además, el atleta de 27 años de edad ratificó que se ha preparado a conciencia para pelear por lo más alto en los Suramericanos de Asunción, con la mira puesta en asegurarse su billete para sus terceros Juegos Olímpicos en París 2024.
“En los 20 kilómetros marcha de Asunción, saldré a por la medalla de oro como consecuencia de los resultados de este año en los Mundiales de Omán y de Oregón, en los que alcancé los mejores niveles deportivos de toda mi vida”, afirmó Pintado.
“Sé que tendré rivales muy fuertes como el brasileño Caiao Bonfim, el campeón mundial Éider Arévalo, de Colombia; el peruano César Rodríguez y mi compatriota David Hurtado, que estamos entre los once mejores marchistas del mundo en los 20 kilómetros”, indicó.
Pintado alcanzó en marzo pasado el cuarto puesto y el primero por equipos en el campeonato mundial de marcha celebrado en Omán; mientras que en los Mundiales de atletismo de julio pasado en Oregón quedó quinto en los 20 kilómetros y cuarto en la prueba de 35 kilómetros.
“Creo que esos resultados se han dado porque luego del duodécimo puesto que alcancé en los Juegos Olímpicos de Tokio, cambié de equipo de trabajo. Actualmente me preparo con Andrés Chocho, hijo de mi primer entrenador, Luis Chocho”, dijo en alusión al formador que falleció en febrero de 2021.
Pintado definió a Andrés Chocho como “uno de los mejores entrenadores de marcha en el mundo”, y dijo que en la preparación que ha tenido conoce que el día de la competición en Asunción, la temperatura ambiente podría llegar a los 30 o 32 grados centígrados.
Esas condiciones “harán más difícil la conquista de la dorada”, apostilló.
Para Pintado, que se colgó la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Lima 2019, su carrera no ha sido fácil. Incluso, en más de una oportunidad estuvo cerca de renunciar a la marcha.
“El apoyo económico desde el Ministerio del Deporte siempre tuvo altas y bajas”, dijo al recordar que tuvo que dedicarse a la venta de camisetas deportivas y de otros artículos que traía de sus viajes por el exterior para juntar dinero y sostener a su familia, sobre todo a sus hijos de 8 y 2 años.
Asimismo, recordó que fue importante que en 2012 le concediesen una beca para el Plan de Alto Rendimiento (PAR), lo que le permitió atender las urgencias económicas, aunque en ciertas ocasiones fue separado de ese programa al que volvió por los buenos resultados que obtuvo en competiciones.
“Viví lo más crítico cuando me sacaron del PAR después de los Juegos Olímpicos de Río 2016, donde no me fue bien por mi falta de experiencia”, relató Pintado.
“Tenía 21 años, y allí fue cuando más cerca estuve del retiro, pero mi madre, mis hermanas, mi familia, que me apoyaron en mis inicios, estuvieron conmigo para que siguiera cumpliendo mis sueños”, agregó el atleta oriundo de la sureña ciudad andina de Cuenca, la misma que Jefferson Pérez.
Pintado es de una de las fuertes opciones de medalla que tiene Ecuador en los duodécimos Juegos Suramericanos, que se celebrarán del 1 al 15 de octubre y en los que participará con 255 deportistas ecuatorianos en 28 disciplinas.