Desde Abu Dabi, en los Emiratos Árabes Unidos, el presidente Daniel Noboa emitió un decreto trascendental. Este documento oficial rechaza y condena enérgicamente la influencia del grupo conocido como ‘Muslim Brotherhood’ (Hermandad Musulmana) en posibles actos terroristas en Ecuador. La medida presidencial responde a una creciente preocupación por posibles atentados en territorio ecuatoriano.
El decreto 620 se fundamenta en un informe confidencial elaborado por el Centro de Inteligencia Estratégica (CIES). Dicho informe advierte sobre los «posibles riesgos a la seguridad nacional por la presencia de integrantes vinculados al Islamismo Radical y Extremista» en el país. Además, el documento de inteligencia reconoce la influencia que el grupo denominado ‘Muslim Brotherhood’ podría ejercer dentro de la nación ecuatoriana.
Daniel Noboa toma cartas en el asunto
En el decreto emitido, Daniel Noboa dispone que el CIES sea el encargado principal de la ejecución de las directrices establecidas. Esta labor se realizará en estrecha coordinación con todas las entidades e instituciones competentes del Estado ecuatoriano. Asimismo, el presidente ecuatoriano ha instruido que, de ser necesario, se coordinen y articulen relaciones con organismos de inteligencia de otros Estados. Esta medida busca fortalecer la capacidad de respuesta ante posibles amenazas.
Por el momento, las autoridades ecuatorianas no se han pronunciado ni ofrecido detalles específicos sobre la presunta presencia del grupo en el país. A pesar de este silencio oficial, la emisión del decreto evidencia una preocupación seria por la seguridad nacional.
¿Qué es Muslim Brotherhood?
La organización islamista transnacional Muslim Brotherhood tiene sus raíces en Egipto, donde fue fundada en 1928 por el erudito islámico y maestro Hassan al-Banna. Inicialmente, su enfoque principal radicó en la difusión de los preceptos del Islam. También se dedicó a la educación y a la provisión de asistencia social. Sin embargo, con el tiempo, la organización expandió sus actividades hacia la arena política.
Su objetivo primordial en este ámbito era poner fin al control colonial británico que entonces imperaba en Egipto. No obstante, la trayectoria de Muslim Brotherhood ha generado controversia a nivel internacional. Varios países, incluyendo Egipto, Arabia Saudita, Rusia y los Emiratos Árabes Unidos, han designado formalmente a la organización como un grupo terrorista.
Es importante destacar que, a pesar de las acusaciones de terrorismo, el grupo Muslim Brotherhood ha afirmado públicamente ser una organización pacífica y democrática. Además, han negado cualquier vínculo formal con grupos militantes como Hamas, aunque algunas fuentes los han relacionado.