La Cruz Roja de Manabí, presidida por Nelson Muñoz Tuma, reclama la devolución de un terreno de 10.000 m² en el barrio Santa Martha, Manta. Cedido en comodato en 2019 al Ministerio de Salud, albergó el hospital de contingencia Rodríguez Zambrano tras el terremoto de 2016.
Por ello, la organización ha sostenido múltiples reuniones con la Coordinación Zonal de Salud para agilizar la devolución, pero no hay avances definitivos. Muñoz destacó la urgencia de recuperar el espacio, vital para las operaciones humanitarias de la Cruz Roja en la provincia.
Además, la Cruz Roja planea usar el terreno para construir una bodega que almacene productos de emergencia, distribuyéndolos a cantones cercanos. También se considera arrendar un área para generar ingresos, ya que la organización depende de autofinanciamiento y voluntarios.
Un módulo sigue ocupado como bodega por el hospital, pero el comodato ya terminó
Actualmente, una pequeña parte del terreno sigue ocupada por el hospital como bodega, con dos guardias vigilando en turnos. Esta situación, mientras la Cruz Roja espera una resolución que le permita retomar el control total del predio, pero el comodato ya terminó.
Hasta ahora, los módulos del hospital de contingencia, instalados en casi 10 mil m², no muestran deterioro, pero ante la exposición al sol, lluvia y viento podrían deteriorarse. Ante ello, la Cruz Roja aclaró que no es responsable de su mantenimiento, pero sugirió reubicarlos en otros cantones mediante acuerdos con el MIES o la Secretaría de Riesgos.
En consecuencia, la Cruz Roja ha iniciado dos procesos legales: uno contra la Zonal de Salud por la devolución del terreno y otro contra el hospital Rodríguez Zambrano por el pago de arrendamiento de oficinas administrativas. Estos juicios reflejan la frustración de la organización tras años de espera.
Sin embargo, desde la Zonal de Salud informaron que en el último mes se han realizado reuniones para encontrar una solución. Aunque el diálogo continúa, no se han establecido plazos claros, lo que mantiene la incertidumbre sobre el futuro del terreno.
Cruz Roja insiste en recuperar sus terrenos
Por su parte, Muñoz expresó preocupación por la demora, recordando que el comodato se firmó con voluntad para apoyar en la emergencia del terremoto. Ahora, con paciencia, la Cruz Roja insiste en recuperar un espacio esencial para su misión humanitaria en Manabí.
Asimismo, la organización subraya su rol como institución internacional autofinanciada, dependiente de voluntarios y recursos propios. La devolución del terreno fortalecería su capacidad de respuesta ante emergencias, beneficiando a comunidades vulnerables en la provincia y cantones aledaños.
Finalmente, la Cruz Roja espera que las autoridades prioricen este caso, considerando su impacto en la operatividad de la organización. La reubicación de los módulos y la devolución del terreno podrían abrir nuevas oportunidades para proyectos conjuntos con otras instituciones, fortaleciendo la gestión de riesgos en la región.
La situación refleja un desafío administrativo que requiere voluntad política y coordinación interinstitucional. Mientras tanto, la Cruz Roja de Manabí mantiene su compromiso con la comunidad, a la espera de una resolución que le permita optimizar sus recursos y continuar su labor humanitaria.