Con mucha complejidad y lágrimas en los ojos, Marcos Alberto Lozano recuerda cómo era su vida hasta antes del 20 de diciembre del 2016.
Todo marchaba bien. Era un hombre alegre, amante del deporte y dedicado a su trabajo en el mundo de la construcción.
En su celular aún guarda las fotos en las que sonríe desde los andamios en los que pintaba y resanaba fachadas de edificios.
De eso ya nada queda, pues en diciembre del 2016 un accidente marcó su vida para siempre.
Él se accidentó en la vía a Santa Ana y desde aquel momento no puede hablar. De hecho, tiene el 70% de discapacidad física.
Ahora, pide ayuda para mantenerse, pues ya no consigue trabajo debido a su condición física.
Hoy habita en la calle Cristóbal Colón, de San Alejo y quienes deseen ayudarlo, pueden contactarse al 052359727 o al 0960896750.