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La madre de Braulio Abraham Jaramillo Alcívar le quiso dar por segunda vez la vida, pero no pudo.

Al joven de 26 años le dispararon, y, aunque su madre le dio respiración boca a boca, Braulio murió horas después.

El atentado ocurrió la noche del lunes, frente a la casa de la víctima, ubicada en la calle 12 y avenida 26.

Jaramillo estaba en el portal, hasta donde llegaron varios hombres armados y le dispararon.

La víctima alcanzó a correr hasta el interior de la casa y tenía dos heridas: una en el abdomen y otra en la espalda.

En un video difundido a través de las redes sociales se observa que la familia, entre gritos, recuesta a Jaramillo en una silla porque le cuesta respirar. Por eso su mamá le da respiración boca a boca, mientras esperan que llegue una ambulancia.  

Su madre luchó hasta el final

Luego de cada bocanada, la mujer grita desconsoladamente, y con esos gritos termina el video de apenas 34 segundos.

La Policía informó que el herido fue llevado al hospital Rafael Rodríguez Zambrano, donde luchó por su vida cerca de siete horas. La madrugada de ayer, 1 de octubre, dejó de existir, debido a que las balas comprometieron órganos vitales.

A esa hora, el cuerpo fue retirado del hospital y trasladado al Centro Forense, donde le hicieron la autopsia.

El cuerpo fue retirado para los funerales en medio del lamento de su familia.

La víctima era hijo del dirigente barrial Juan Abraham Jaramillo, que colocó un mensaje en su cuenta de Facebook a modo de despedida: “Dejas un gran vacío, nos harás mucha falta, pero seguimos firmes. Me has dejado el alma partida a mí y a todos tus hermanos y sobrinos. Dios te tenga en su santa gloria y muy pronto nos veremos”.

La Policía recogió varios casquillos de un arma calibre nueve milímetros que quedaron en la escena del atentado.

En la investigación esperan encontrar pistas para dar con los responsables y establecer la causa de este ataque armado. Jaramillo es la primera víctima mortal del mes de octubre.  

En lo que va del 2024, en el distrito de Manta, Montecristi y Jaramijó se han registrado 227 muertes violentas.  

En comparación con enero a septiembre del 2023, considerado el año más violento de la última década, en el 2024 se han registrado 22 víctimas más. La mayoría asesinadas al estilo sicariato.