José Chiquito no podía creer lo que estaba viendo. Dentro de una funda de basura de color negro estaba su hija, Yanina Chiquito Gil, de 24 años, pero muerta.
Ella había sido reportada como desaparecida desde el lunes.
Su criminal la había amordazado y maniatado sus manos y pies.
Como si se tratara de una película de horror, el presunto asesino, Byron Analuisa Barragán, observaba con frialdad el sufrimiento de José quien gritaba pidiendo ayuda mientras desgarraba la funda en la que la habían ocultado.
El hallazgo ocurrió en el inmueble del sospechoso de femicidio, ubicado en la ciudadela La Ventura, de Babahoyo.
A las 07h00 del lunes Yanina Chiquito salió de la casa de su padre ubicada también en la ciudadela La Ventura, la mujer debía acudir a su trabajo en una agencia de viajes, pero en el camino, algo pasó para que vaya a la vivienda de su verdugo con quien, al parecer, mantenía una relación sentimental.
Al pasar las horas y ver que Yanina, quien era madre de una menor de cinco años, no llegaba a casa, sus progenitores decidieron reportar su desaparición ante la Policía y empezaron la búsqueda.
Incluso en su cuenta de Facebook el sospechoso había compartido aquella novedad.
“Fuimos al hospital, a la morgue, a todos lados a buscarla, hasta dos veces a la casa de ese hombre, porque nos informaron que ella había estado ahí, pero ese sujeto no nos dejaba ingresar”, contó sollozando el padre de la víctima, quien ante la insistencia, acudió cerca de la medianoche del lunes a la vivienda de Analuisa por tercera vez, en esa ocasión acompañado de la Policía.
Luego de insistir, el sospechoso permitió que solo una persona ingrese al inmueble. Es ahí que José portando una linterna recorrió la vivienda hasta llegar al dormitorio de Analuisa y junto a la cama vio una funda de color negro.
“Yo le pregunto y eso qué es, él me dice es basura y saca de ahí unas botellas. Yo toco la funda y siento unos pies, al abrirla encuentro a mi hija atada de manos y pies y sólo vestía ropa interior”, contó con dolor José.
La Policía informó que al verse descubierto, el presunto femicida no puso resistencia y fue detenido.
“Según las investigaciones, el hombre pretendía deshacerse del cuerpo, para ello estaba esperando la noche. La víctima fue asfixiada o estrangulada, además estaba maniatada”, indicó Patricio Romero, coronel de la Policía.
José Chiquito indicó que Byron trabaja en una óptica, su hija anteriormente laboraba en un almacén ubicado junto a la óptica, fue ahí donde se conocieron.
“Yo desconozco que hayan tenido una relación sentimental, mi hija hace siete meses se había separado del padre de la niña y actualmente ella vivía en mi casa”, informó.