El Ministerio de Defensa de Colombia ha emitido una alerta de seguridad para que policías y militares en Bogotá se movilicen vestidos de civil, en respuesta a la escalada de violencia del Clan del Golfo, que ha dejado 35 agentes muertos en las últimas semanas, principalmente en Antioquia y la región Caribe.

Medidas ante el “plan pistola” que se aplicará en Colombia

La recomendación forma parte de un nuevo protocolo de seguridad emitido de forma interna por el Gobierno, al que tuvo acceso Blu Radio. En el documento, se pide a los miembros de las fuerzas del orden que eviten utilizar uniformes en el transporte público, que modifiquen sus rutas habituales y que limiten la información personal en redes sociales.

Estas directrices buscan contrarrestar los efectos del llamado “plan pistola” impulsado por el Clan del Golfo, una organización narcoparamilitar responsable de una ola de asesinatos dirigida contra miembros de la Policía Nacional y del Ejército.

Ataques sistemáticos a efectivos fuera de servicio

La mayoría de los ataques han ocurrido mientras las víctimas se encontraban fuera de servicio, en situaciones de vulnerabilidad. El Ministerio de Defensa ya había permitido que los agentes llevaran sus armas reglamentarias a casa como una medida preventiva adicional.

«El personal debe mantenerse alerta durante todos sus desplazamientos y evitar en lo posible usar uniforme en transporte público», señala el documento oficial, que ha sido compartido en varias unidades policiales de la capital.

Gobierno refuerza ofensiva contra el Clan del Golfo

El presidente Gustavo Petro ha anunciado un refuerzo de las operaciones militares y policiales contra el Clan del Golfo, considerado uno de los grupos criminales más poderosos de Colombia tras la desmovilización de las FARC. La organización ha incrementado su actividad violenta en varias zonas del país, especialmente en el norte y el occidente.

Las autoridades no descartan que los ataques formen parte de una estrategia de presión armada del grupo para influir en decisiones judiciales o negociaciones. En este contexto, se han intensificado los operativos de inteligencia para neutralizar a los cabecillas responsables de la ofensiva.