El papa León XIV, Robert F. Prevost, dedicó un emotivo mensaje a Chiclayo durante su primer discurso como pontífice, pronunciado el 8 de mayo de 2025 en el Vaticano. Su vínculo con esta ciudad peruana, donde fue obispo desde 2015, destaca por su labor pastoral y filantrópica. El mensaje subraya la importancia de Chiclayo, ubicada en Lambayeque, como un centro cultural y turístico del norte del Perú.
Robert F. Prevost, ahora papa León XIV, asumió el papado con un discurso que captó la atención mundial por su referencia a Chiclayo, ciudad que considera su hogar espiritual. Nombrado obispo de Chiclayo en 2015 por el papa Francisco, Prevost recibió la nacionalidad peruana ese mismo año, consolidando su vínculo con el Perú.
La labor del papa en Chiclayo
Durante más de ocho años, lideró iniciativas altruistas en la diócesis, apoyando a comunidades vulnerables y promoviendo la cultura local. Previamente, en las décadas pasadas, trabajó en la misión de Chulucanas, en Piura, lo que marcó su conexión inicial con el norte peruano.
Chiclayo, capital de la provincia homónima en la región Lambayeque, se encuentra a 760 kilómetros al norte de Lima, a orillas del océano Pacífico. Con un clima cálido y una rica herencia cultural, es un destino clave para turistas nacionales y extranjeros. La catedral de Chiclayo, de estilo neoclásico y diseñada por Gustavo Eiffel en 1869, es uno de sus principales atractivos, ubicada en el parque principal de la ciudad. Otros sitios de interés incluyen el Complejo Arqueológico de Túcume y la ciudad de Lambayeque, que albergan el legado precolombino de la cultura lambayeque.
La conexión desde Lima
La conectividad de Chiclayo facilita el acceso. Desde Lima, un vuelo directo al aeropuerto José A. Quiñones toma aproximadamente una hora y media. Por tierra, el trayecto en bus interprovincial desde la capital dura entre 12 y 14 horas, con diversas empresas ofreciendo servicios regulares. En la ciudad, taxis, mototaxis y buses conectan el centro urbano con mercados, barrios y destinos turísticos cercanos como Ferreñafe.
La gastronomía chiclayana, con platos como el seco de cabrito, es otro de sus atractivos. La hospitalidad de su población y su rol como puerta de entrada al norte peruano refuerzan su relevancia. La atención internacional generada por el mensaje del papa León XIV posiciona a Chiclayo como un punto de interés global, invitando a descubrir su historia, cultura y accesibilidad.
El mensaje del papa León XIV no solo resalta su trayectoria personal, sino que pone a Chiclayo en el radar turístico. Lambayeque, conocida por su aporte arqueológico y cultural, espera un incremento en el flujo de visitantes, impulsado por la visibilidad que otorga la referencia papal. (10)