Este martes 10 de junio de 2025, el Bloque de Seguridad intensificó sus operativos en Guayaquil con el despliegue de más militares en el centro de la ciudad. Esta acción busca reforzar la seguridad en una zona afectada por la violencia y desarticular las redes criminales que operan en el área.
Los uniformados se enfocan en el control de armas, explosivos y la vigilancia de municipios en la Bahía de Guayaquil. Según un comunicado del Ministerio de Defensa, esta intervención coordinada tiene como objetivo restablecer el orden público, proteger a los ciudadanos y debilitar las estructuras delictivas que amenazan la paz social.
El despliegue de más militares responde a la creciente inseguridad que vive Guayaquil, especialmente tras la masacre ocurrida en el distrito Pascuales, donde asesinos terminaron con las vidas de ocho personas menos de una hora. A cinco de las víctimas las acribillaron en la zona industrial de Peca, mientras que las otras tres perdieron la vida en sectores cercanos. Las víctimas, en su mayoría conductores de tricimotos, las atacaron en plena vía pública, generando conmoción entre los habitantes y comerciantes.
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Últimos hechos motivaron el despliegue de más militares
La violencia en Guayaquil no es un fenómeno aislado. En días previos, criminales asesinaron a una pareja frente a una escuela en Mucho Lote, y el domingo anterior cuatro personas murieron en un ataque en Bastión Popular. Estos hechos reflejan un preocupante aumento de homicidios relacionados con enfrentamientos entre grupos narcoterroristas que buscan mantener el control territorial.
El ministro de Gobierno, José De la Gasca, junto con la gobernadora Zaida Rovira, visitaron la zona afectada para dialogar con comerciantes y reafirmar el compromiso estatal de garantizar la seguridad. De la Gasca hizo un llamado a los operadores de justicia para evitar la liberación de delincuentes capturados, enfatizando la necesidad de acabar con el llamado “turismo carcelario”.
Operativos policiales
La Policía Nacional, por su parte, ha reforzado sus operativos en Guayaquil, recuperando armas de fuego y deteniendo a presuntos sicarios. La Alcaldía de Guayaquil también colaboró con agentes municipales para controlar el uso de tricimotos y taxis clandestinos, considerados vehículos frecuentemente vinculados a actos delictivos.
El despliegue de más militares en Guayaquil es una respuesta directa a la crisis de seguridad que afecta a la ciudad. Sin embargo, la persistencia de ataques violentos evidencia que la problemática requiere un abordaje integral que incluya prevención, justicia efectiva y políticas sociales para reducir la violencia estructural.
