Contrario a lo que se pensaba hasta ahora, los glaciares que cubren laderas montañosas y cráteres en Marte contienen una sorprendente pureza de hielo de agua, superior al 80 %, según un estudio publicado recientemente en Icarus. El hallazgo aporta nuevos elementos para entender la historia climática del planeta y apunta a un posible recurso vital para misiones humanas en el futuro.
Revisión científica y metodología estandarizada
El equipo investigador, liderado por Yuval Steinberg, recién graduado del Instituto de Ciencias Weizmann (Israel), analizó glaciares cubiertos de escombros utilizando datos de radar de penetración profunda. La investigación fue coautorizada por Isaac Smith, científico senior del Planetary Science Institute (PSI).
Según Smith, la falta de una metodología común había dificultado comparaciones entre sitios estudiados en investigaciones anteriores.
“Los investigadores habían aplicado diferentes técnicas en varios sitios, y los resultados no eran fáciles de comparar”, explicó.
Con el objetivo de establecer un criterio uniforme, el equipo midió propiedades dieléctricas (velocidad de propagación de ondas de radar) y tangentes de pérdida (nivel de disipación de energía) en cinco sitios distribuidos globalmente por Marte.
Resultados: hielo más puro de lo estimado
Los resultados mostraron una consistencia sorprendente en los cinco glaciares, ubicados en regiones opuestas del planeta. Esta homogeneidad en las propiedades físicas de los glaciares llevó a los científicos a concluir que el proceso de formación y preservación de estos depósitos de hielo fue similar en toda la superficie marciana.
Los hallazgos contradicen la suposición de que el material principal en estos glaciares sería roca mezclada con pequeñas cantidades de hielo. En cambio, el análisis reveló una proporción mayoritaria de hielo de agua, oculto bajo capas de polvo y escombros rocosos.
Glaciaciones generalizadas y conservación
Los científicos consideran que esta uniformidad indica la existencia de una o más glaciaciones generalizadas en Marte. Además, la pureza del hielo proporciona datos relevantes sobre cómo se han conservado estos depósitos a lo largo del tiempo.
“Esto es importante porque nos indica que los mecanismos de formación y conservación son probablemente los mismos en todas partes”, subrayó Isaac Smith.
La investigación representa un avance crucial al unificar técnicas de análisis que anteriormente se aplicaban de forma aislada, permitiendo por primera vez una comparación global estandarizada entre glaciares marcianos.
SHARAD: radar clave en el descubrimiento
El estudio se basó en datos del instrumento SHARAD (Radar de Sondeo Poco Profundo), a bordo del Mars Reconnaissance Orbiter de la NASA. Este radar puede penetrar la superficie del planeta y revelar las capas internas de hielo y roca.
Uno de los sitios analizados nunca había sido estudiado con anterioridad, y en dos de los cinco lugares solo se contaban con estudios parciales. La identificación de un nuevo sitio compatible con SHARAD permitió ampliar el muestreo y mejorar la fiabilidad de los resultados.
Implicaciones para futuras misiones humanas
Además de su valor científico, este descubrimiento tiene importantes aplicaciones prácticas para la exploración humana de Marte. El acceso a hielo de agua en alta pureza facilitaría la producción de oxígeno y combustible, así como el suministro de agua potable en futuras misiones tripuladas.
“Conocer la pureza mínima de estos glaciares ayuda a planificar la futura exploración humana de Marte, cuando el uso de recursos locales se vuelve crucial”, afirmaron los investigadores.
Próximos pasos en la investigación
El equipo ahora planea identificar nuevos glaciares que puedan ser evaluados con los mismos parámetros, a fin de consolidar su hipótesis sobre glaciaciones generalizadas y procesos de conservación comunes.
La investigación continúa ampliando los horizontes del conocimiento sobre la historia geológica y climática de Marte, y al mismo tiempo fortalece la base de datos esencial para diseñar misiones humanas sostenibles más allá de la Tierra.